Los integrantes de Tempo Novo, en Ferrol, y los de Peque Solidarium y Da Capo Solidarium, en Narón, siguen ensayando
08 abr 2020 . Actualizado a las 09:27 h.El COVID-19 puede paralizar un país entero, pero no la música. Dos coros de la zona no se han quedado de brazos cruzados, pese al encierro al que obliga la pandemia, y han tirado de las nuevas tecnologías para seguir adelante con los ensayos.
La sección juvenil de Concerto Tempo, que se llama Tempo Novo, integrada por once chicos de entre 12 y 18 años, se reúnen cada sábado a las once y media -antes del encierro lo hacían el mismo día y a la misma hora, aunque en el centro cívico de Canido- mediante skype para ensayar. José Antonio García Mato, director de la formación, explica que con esta agrupación «foi posible porque non son moitos rapaces, xa que esta sección creouse o setembro pasado». La primera parte del ensayo es muy parecido al que hacían cuando se reunían físicamente en Canido, ejercicios de técnica vocal y respiración. La segunda parte, destaca García Mato, «é un pouco máis complicada, xa que ás veces hai interrupcións, non todas as wifis van igual de ben, pero como pola semana mandámoslle as partituras para que as vaian mirando, conseguimos facer o ensaio non igual de ben que antes, pero moi parecido».
Las nuevas tecnologías no solo permiten seguir adelante con los ensayos, sino también «marcar unha rutina para os nenos, que aínda que teñen que estar na casa, polo menos pódense distraer coa música», destaca el director.
Con la sección infantil del coro, Concerto Tempiño, no han mantenido los ensayos por skype «porque son moitos máis, 18, e porque son máis pequenos, e obrigariamos ao pais a estar pendentes, e somos conscientes de que moitos teñen que teletraballar». De todas formas, Icía Rey, profesora de expresión corporal, está grabando las coreografías que estaban trabajando los niños, y Joel Crespo, pianista acompañante, está haciendo lo mismo. También se ha habilitado un canal de Youtube en el que se pueden ver los conciertos de Concerto Tempiño.
En Narón las directoras de los coros Peque Solidarium y del Da Capo Solidarium del Concello tuvieron claro desde el inicio del encierro que ningún virus iba a parar su actividad. Por eso, desde el primer día Cristina Teijeiro, Olga Vigo y Graciela Galdo organizaron sus clases. Todas las semanas preparan las videoconferencias para los ensayos de los sábados, los pequeños hacen técnica vocal y aprenden nuevas canciones en directo, que luego repasan en el canal que han creado y donde suben divertidos vídeos y retos musicales, incluso las profes se disfrazan de hawaianas o de Spiderman. «Al principio teníamos miedo que los padres se asustaran por esta nueva forma de enseñar y porque algunos son muy pequeños, pero nada más lejos de la realidad, lo agradecieron muchísimo».
Lo mismo pasa con los mayores del Da Capo Solidarium, que tienen su propio canal de youtube con técnicas vocales y las melodías que tienen que practicar.