Sus alumnos tienen edades y condiciones de salud dispares, ya que su oferta formativa incluye prácticas diferentes, incluyendo el aéreo
11 sep 2023 . Actualizado a las 20:11 h.Rebeca Guevara es quiromasajista, aunque se dedica a otra práctica terapéutica diferente. Se trata del pilates, la actividad central que desarrolla en su estudio de Narón, donde imparte clases de distintas especialidades.
Los alumnos del centro Rebeca Guevara Pilates y Movimiento son muy diversos, ya que según comentó la instructora, antes primaban las personas mayores y ahora también se apunta mucha gente joven y sana. La profesional indicó que los beneficios de practicar la disciplina radican en la ayuda para fortalecer y estirar el cuerpo a partes iguales.
Aún así, la naturaleza terapéutica del pilates continúa atrayendo a personas que adolecen de ciertas patologías y dependiendo de estas, se recomienda una especialidad u otra. «Tengo alumnos que me dicen: es que para mí es mi medicina», declara Guevara, quien añade que «suelen quedarse porque el pilates mejora la postura y el dolor». La profesora puso como ejemplo de alivio a aquellos alumnos que suelen sufrir dolencias en la zona lumbar o los que padecen ciática.
La especialidad más básica es el pilates que se realiza sobre el suelo, una actividad que repercute a nivel físico y psicológico. El método se atribuye a Joseph Pilates, quien denominó la técnica como contrología por prevalecer el control de la mente sobre el cuerpo. A partir de la inventiva surgieron variantes como el prenatal y postnatal, orientado específicamente a fortalecer a la madre antes del parto y recuperarse en la etapa posterior.
Otra de las modalidades que desarrollan en el estudio y que suele llamar la atención es el pilates aéreo, una forma de desempeñar la práctica que se realiza por medio de un columpio. Asimismo, el tipo «reformer» se caracteriza por el empleo de máquinas específicas para la actividad. Esta última variante presenta la particularidad de desempeñarse en «clases muy individualizadas y en grupos aún más reducidos», indicó Guevara, que según explicó, siempre imparte la formación de manera personalizada y con pocos alumnos.
Uno de los beneficios que mantienen en común tanto las clases básicas de pilates como las que se indican para las fases que rodean el embarazo es la mejora de la postura. Por otro lado, las lecciones aéreas con columpio tienen la particularidad de trabajar la totalidad del cuerpo para una actividad más completa.
Aparte de pilates, la instructora también imparte clases de abdominales hipopresivos, un ejercicio al que asigna cambios físicos como el fortalecimiento del suelo pélvico y el aumento de la capacidad respiratoria. Además, en el estudio se realizan talleres de TRX, que son entrenamientos en suspensión que se efectúan por medio de cintas especiales, y mindfulness o consciencia plena, una actividad que trata de encontrar un estado mental con el que experimentar sensaciones de bienestar y plenitud.
En relación a las clases rutinarias que ofrecen en Rebeca Guevara Pilates y Movimiento, la responsable explicó que el pilates que se realiza sobre el suelo es el que goza de una mayor disponibilidad horaria y está indicado para todos los públicos, mientras que el aéreo está dirigido a un tipo de usuario más específico. Asimismo, ambos tipos suponen el mismo gasto. Según explica la especialista, el pilates aéreo requiere la realización de determinadas maniobras invertidas o volteretas, por lo que existe la posibilidad de que algunos perfiles propensos a ello se mareen. Para esta clase de alumnos podría ser más adecuado empezar por probar un taller de TRX, que por lo general, se indica para todo tipo de público, siempre dependiendo de las lesiones físicas que presenten.
Formación continua
Rebeca Guevara, que es natural de Ferrol, ha recibido formación reglada en diferentes escuelas que enseñan pilates y centros especializados en ejercicios hipopresivos. No obstante, indicó que le satisface permanecer en un estado de continuo aprendizaje, por lo que cada año se instruye con algún curso nuevo que le ayude a obtener una perspectiva amplia. Además, la profesional considera esta disposición como una actitud consecuente y sensata con su condición de autónoma.
Su sed de conocimiento es el motivo por el que la docente cursó los estudios de quiromasajista aunque no pensaba ejercer, ya que estaba interesada en adquirir conocimientos de anatomía para su práctica profesional. Además, actualmente se está formando como Técnico Superior en Actividades Físicas y Deportivas.
Origen del proyecto
Antes de lanzarse a emprender su negocio actual, Rebeca Guevara ya había trabajado con anterioridad en un estudio de pilates, en Esteiro, junto a una compañera. Sumando esta experiencia a los ánimos de un nuevo socio, ambos inauguraron el centro el día 1 de diciembre de 2014, aunque a día de hoy el local está regentado al completo por ella.
Rebeca Guevara Pilates y Movimiento es el nombre del proyecto que administra la profesional en solitario desde hace cinco años. Según la fundadora, la acogida fue muy buena porque tanto ella como el socio con el que comenzó disponían de alumnos interesados en recibir sus formaciones. «Mi clientela es como una familia y algunos ya son amigos», manifestó la profesora.
Cuando se convirtió en la responsable exclusiva del centro, impartía todas las clases ella misma, aunque al principio su socio también colaboraba con algunas. El tiempo puso las cosas en su lugar y terminó por contratar a dos personas, que le ayudaron a aliviar el horario con las formaciones en pilates y tonificación.