Los Bomberos de Ferrol salvan la vida de un matrimonio en la localidad nedense, asolada por el desbordamiento del río Basteiro
14 nov 2023 . Actualizado a las 16:01 h.Todo un panorama de desolación arroja Neda, tras la terrible riada padecida en esta madrugada. Las lluvias acumuladas durante el último mes en Ferrolterra han provocado esta noche inundaciones en casas de todos los municipios de la ría. Pero en Neda los daños han sido especialmente cuantiosos, afectando a una veintena de viviendas que han perdido buena parte de sus pertenencias.
Sobre las 02.00 de esta madrugada, el río Basteiro se desbordó, derrumbó un muro de piedra y posteriormente arrancó un portalón de aluminio en la zona de Santa María de Neda. Un gran caudal de agua cruzó la carretera general y llegó hasta las casas junto a la iglesia. «Llegó un tsunami y lo perdimos todo», se lamentaban Jorge López y su mujer Raquel Sanmartín, una de las familias más afectadas.
En su casa, el agua alcanzó 1,2 metros de altura destrozando completamente el salón-cocina, donde tenían electrodomésticos, muebles y ajuar. Todo ha quedado inservible. Se fue la luz y también han perdido toda la comida que tenían en el congelador. «No tenemos donde dormir ni donde comer», se lamenta este matrimonio.
Están vivos de milagro y gracias al rescate de los Bomberos de Ferrol. «Estábamos pendientes de la crecida desde la medianoche, a las 02.00 escuchamos un estallido fuerte, vino un oleaje y nos dimos cuenta de que no había solución», indica Jorge. Rompieron la puerta de la parte trasera para aliviar la avalancha de agua y se aferraron a la parte superior de la casa, «llamamos a los Bomberos porque no teníamos por donde salir mientras veíamos que habíamos perdido todo lo que trabajamos mi mujer y yo durante toda la vida».
La anterior riada en Neda fue en 2004, pero no la recuerdan con semejante fuerza. «Aquí en diez minutos lo hemos perdido todo, hasta el agua barrió mi cartera con toda la documentación», apunta Jorge, que es patrón de los mariscadores de Barallobre. Pero no solo hay desesperación, también hay miedo a que esto vuelva a suceder: «A las cinco de la tarde volverá a subir la marea y volveremos a padecer las crecidas, por eso pedimos al Concello que ponga sacos de arena donde rompió el muro porque si no será un desastre».
De su salón solo se salvó la televisión porque estaba colgada, el agua arrastró trofeos, mató a una gallina, llevó a los perros a 150 metros... Los afectados están pidiendo contenedores al Concello para depositar los objetos dañados y dar parte a los seguros. «Pedimos ayuda a todas las administraciones que puedan echar una mano, llevamos toda la noche sin dormir pero por lo menos estamos vivos», recalca Raquel. Indica que «estuvimos atrapados por un tsunami, llevamos aquí veinte años y nunca nos pasó esto». Jorge concluye que «algo sucedió con el río y esto no puede volver a suceder».
«Temos todo desfeito»
Justo en la casa de al lado, el matrimonio formado por Ramiro Hermida e Isabel Salido enseña su casa: «Está todo desfeito e reventado, cociña, salón, baños, habitación... pasaremos a noite agora moi malamente». Ella recalca que «somos enfermos crónicos de 40 y 66 años, él con problemas de riñón, corazón, hígado, dos prótesis en rodillas». Y agradece que «dos bomberos de Ferrol muy majos nos vinieron a ayudar, ya estábamos en el patio y lo importante es estar con vida».
Desde el Concello de Neda informan que «Efectivos de Protección Civil e operarios de mantemento municipais están a colaborar cos residentes da zona afectada, achicando auga das vivendas, e o Concello ten previsto instalar contedores para facilitar a retirada de mobiliario estragado». También baraja «a colocación de big bag de area e grava no lugar que ocupaba o muro caído, buscando que coa crecida de nivel do río a auga non volva chegar ás casas». Se mantiene la situación de alerta, y está cortado el acceso desde O Roxal a la pista de O Carballal.