Veganité, puesto de comida del Festival de Ortigueira: «Do churrasco vegano cómense ata os ósos»

ANA F. CUBA ORTIGUEIRA / LA VOZ

ORTIGUEIRA

Los responsables de Veganité, presente en el Mundo Celta por quinta vez, con una ración de churrasco vegano y un tarro de galletas
Los responsables de Veganité, presente en el Mundo Celta por quinta vez, con una ración de churrasco vegano y un tarro de galletas I. F.

María Álvarez, Mikel Portal y Rut Argibay comandan la caseta, que ofrece productos de origen vegetal y sin gluten

14 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

María Álvarez y Mikel Portal —«case» de Ortegal— y Rut Argibay —nació en Poio y vive en Santiso— llevan dos meses elaborando la base de los platos que estos días cocinan y sirven en el puesto Veganité, situado en la feria de artesanía del Festival de Ortigueira. María insiste en que esta iniciativa se encuadra en la Asociación Rural Vivo do Ortegal.

Es el quinto año que montan su caseta en el paseo, frente a los jardines Xulio Dávila, y muchos clientes les buscan. «Moita xente doutros anos vennos ver, quérennos... iso fainos moita ilusión, pregúntannos por outros festivais aos que imos», explican. A comienzos de junio acudieron al Festival Alternativo Millo Verde, en Redondela, y en agosto estarán en Pardiñas (Guitiriz), y después en el Vibra Balboa (El Bierzo). María y Rut llevan más de diez años juntándose para vender comida. Rut y Mikel trabajan en restaurantes veganos, y los tres idean sus propias recetas y preparan otras extraídas de libros, con productos de origen vegetal y sin gluten (todo salvo las berlinas).

«Do churrasco vegano cómense ata os ósos, vai cortadiño coma se fose unha costela de porco», apuntan sobre uno de los platos que más sorprende, sin descubrir el ingrediente secreto, que casi nadie adivina. También ofrecen zorza, hamburguesas y tres tipos diferentes de falafel: «O clásico, con garavanzos; con chícharos [guisantes], limón e menta, inspirado na cociña británica; e con lentellas e cacahuetes», enumera Mikel.

La tarta de zanahoria es uno de los postres favoritos de los comensales que hacen cola para conseguir su ración. «Se che gusta cociñar é agradecido, e o ambiente é moi bo», recalcan, contentos por reencontrarse con caras conocidas de este mismo festival y de otros, y agradecidos al Concello de Ortigueira «polo seu apoio». Desde ayer abren desde la una de la tarde hasta la madrugada. «Cando máis traballamos é pola noite, entre concertos e cando rematan», comentan.

En cuanto se cierra la cocina hay que limpiarlo todo y renovar el aceite para el día siguiente. «O peor é o cansazo», reconoce María. Apuestan por la comida vegana y los productores locales, «sempre que se pode, por cantidade e polo tipo de materia prima».

Seis bandas, David Bellas y la Escola de Gaitas, el viernes en el Mundo Celta

En la avenida da Penela se cruzan las colas del supermercado Claudio con la muchedumbre que se mueve sin cesar. En frente, las terrazas rebosan vida, al sol y a la sombra, entre raciones de raxo y calamares y vasos saturados de hielo. La avalancha folkie se vive en las calles, en las tiendas, en los bares, en el pinar de Morouzos y, en cuanto cae la tarde, en el puerto de Ortigueira. «Estamos muy cansados, pero el ambiente es muy bueno, ves mucha alegría», comentaba ayer una camarera, que suma menos horas de sueño esta semana que cualquier día del invierno. «Deja, deja, que eso ya vendrá», dice entre risas, sin querer dar su nombre ni el del local, «a ver si van a venir los inspectores de Trabajo».

Nadie cumple los horarios estos días, ni nadie quiere hacerlo. La música suena en cualquier momento por cualquier esquina. Hoy vuelve el festival callejero, con la banda de gaitas La Laguna del Torollu (12.30 horas), la banda escocesa Peoples Ford Boghall & Bathgate Caledonia Pipe Band (13.00), la bandina La Garrapiella (13.30), la banda de gaitas Abelladeira (17.00), el grupo folklórico Trebeyu y la Bagad Sonerien An Oriant (20.00), fundada en Lorient (Bretaña francesa) hace 40 años. El gaiteiro viveirense David Bellas actuará en la iglesia parroquial (19.00). Y, por la noche (22.00), en el escenario de la Alameda sonará de nuevo la Peoples Ford Boghall & Bathgate Caledonia Pipe Band, un referente, con medio siglo de historia.

Escocia dará paso a Ortigueira, con la Escola de Gaitas, un clásico del Mundo Celta, con Rodrigo López al frente. «Estamos ensayando a tope, más que nunca», apuntaba ayer por la tarde el director. «Habrá una parte tradicional y otra más folk, con colaboradores, uno con un keytar [una especie de teclado que se lleva como una guitarra], será una actuación transgresora», avanzaba, sin desvelar las sorpresas. Cerrará la noche el folk de Rura (Escocia) y el grupo bretón Startijenn. Hoy hay taller de baile bretón (16.00) en el IES, y sigue el de fotografía y las exposiciones. Ortigueira se sumerge en los días más intensos.