El verano pone a prueba los servicios en concellos costeros del área de Ferrol

A. F. C. FERROL / LA VOZ

ORTIGUEIRA

Varias autocaravanas en el aparcamiento de la playa de A Frouxeira, en Valdoviño
Varias autocaravanas en el aparcamiento de la playa de A Frouxeira, en Valdoviño CÉSAR TOIMIL

El crecimiento estacional de la población obliga a reforzar la recogida de basura y prever medidas en el suministro de agua, y destapa los problemas de aparcamiento

09 jul 2024 . Actualizado a las 22:21 h.

Los municipios costeros de Ferrolterra, Ortegal y Eume refuerzan los servicios de limpieza, con especial atención en las playas, y recogida de basura durante el verano, por el aumento de población. En materia de seguridad, los ayuntamientos de menos de diez mil habitantes que disponen de Policía Local (salvo Ortigueira, Neda y Cariño) contratan auxiliares para poder cubrir toda la semana, en turnos de mañana y tarde, a diferencia de lo que sucede el resto del año; y socorristas para los arenales. Esta temporada han conseguido más vigilantes, pero en Cabanas o Valdoviño, con gran afluencia de gente a las playas, no han logrado completar las plantillas; y en Ortigueira aún no han empezado a trabajar.

Los problemas de aparcamiento se concentran en el entorno de las playas, como en Cabanas, pero también en los cascos urbanos de poblaciones como Ares o Cedeira, donde se multiplica la población en este período. En Valdoviño, otro municipio con gran afluencia de visitantes, el alcalde, el socialista Alberto González, reconoce las dificultades que entraña el estacionamiento, en especial en los arenales de Vilarrube —«es zona de dominio público marítimo terrestre y espacio natural»—, Campelo o Mourillá. «No es fácil encontrar soluciones próximas», abunda, y advierte del trastorno que genera la presencia creciente de autocaravanas en el entorno de las playas y en otros espacios protegidos, «donde el Concello no tiene competencia para poder actuar».

Socorristas en Valdoviño

Destaca como uno de los mayores costes que soporta Valdoviño en verano la contratación de socorristas: «Supone 140.000 euros solo para el personal (a mayores del mantenimiento de las instalaciones, megafonía, banderas o productos sanitarios), con una ayuda máxima de 40.000 por parte de la Xunta». Este año disponen de 16 de los 30 necesarios, diferencia que tratarán de paliar con auxiliares o técnicos sanitarios en A Frouxeira y Pantín, los arenales con mayor número de bañistas. Pero no desisten de conseguir más efectivos y han lanzado una segunda convocatoria (los interesados pueden presentar su solicitud en el registro general o a través de la sede electrónica durante cinco días naturales, contados desde este martes).

Con el crecimiento de la población se genera más basura. «La empresa amplía la recogida de los contenedores a los siete días de la semana, en las zonas más próximas a la costa», indica el regidor valdoviñés. Para la limpieza de las playas recurren a contratos temporales costeados con ayuda de la Diputación. También se intensifican los controles del agua potable y las labores de desbroce de viales y espacios públicos, con operarios que sufraga el Plan de Emprego Local de la Diputación.

El alcalde de Cedeira, el socialista Pablo Moreda, señala que el mayor impacto del incremento estacional de población se observa en los residuos: «Aínda facendo a recollida todos os días, nótase moito, en todos os contedores». Sobre el estacionamiento, destaca que este verano, «aparte dos aparcamentos disuasorios que xa había outros anos, gañáronse prazas en varias rúas que pasaron a ser de sentido único, como a Cerdido, a Pitilleira ou parte da Silva». En la página web del Ayuntamiento de Ares se pueden consultar las áreas de párking disponibles en el municipio. Las mayores aglomeraciones se registran en el entorno de las playas, aunque tanto Chanteiro como O Raso (ahora en la finca del cámping) y Seselle cuentan con espacios públicos gratuitos.

Concellos mucho más pequeños, como Mañón, con apenas 1.300 habitantes, tienen que soportar una avalancha de coches, como apunta el alcalde, el popular Alfredo Dovale: «El punto más conflictivo es el Porto de Bares, porque se multiplica la población y no hay alternativa para aparcar. Hemos instalado un semáforo [que funciona en verano y Semana Santa], pero hay quien se lo salta. En Esteiro [O Barqueiro] podríamos habilitar el campo de fútbol para estacionar».

Mañón, sin vigilantes para las playas, contrata dos brigadas de diez personas y tres conductores de motobomba para la campaña antiincendios, con financiación de Medio Rural; y recurre a personal temporal para la limpieza de viales y espacios naturales. Cuenta con un chófer más para el camión de recogida de basura, de gestión directa. Y en previsión de que puedan repetirse los problemas de suministro de agua potable del año pasado, Dovale avanza que se «volverán a limpiar los depósitos».