
La eumesa Miriam Rodríguez estuvo con su familia entre Pontedeume y Lugo antes de tener que regresar a la academia de «Operación Triunfo 2017»
29 ene 2018 . Actualizado a las 16:54 h.A las 11.05 horas del pasado domingo aterrizó en A Coruña después de dos meses aislada, en los que solo había podido salir unas horas a una firma de discos. Miriam Rodríguez Gallego (Pontedeume, 21 años), una de los nueve últimos concursantes de Operación Triunfo 2017, tuvo la oportunidad al igual que todos sus compañeros de pasar la Nochebuena y la Navidad con su familia, antes de regresar a la academia. En las escasas 30 horas de las que dispuso, disfrutó de sus seres queridos, apenas se interesó por los comentarios de las redes sociales y, sobre todo, trasladó la «enorme felicidad» con la que está viviendo el reality.

En el aeropuerto esperaron que llegara de Barcelona su padre, Ramón; su hermano, Efrén; su novio, Pablo, y su prima Ana. Desde allí se fueron directamente a su casa familiar de Pontedeume. La eumesa tuvo algo de tiempo para descansar y para la cena de Nochebuena se desplazó a Lugo, donde vive su abuelo materno. Compartió mesa con una veintena de familiares, entre su familia cercana, sus tíos y sus primos, que no le pararon de hacer preguntas sobre el concurso. Eso sí, también tuvo que contenerse por la laringitis que lleva arrastrando las últimas semanas.
A la hora de los regalos, recibió uno muy especial de su hermano e Inés, la novia de este. Le obsequiaron con un león de peluche, por el apodo que le han puesto sus seguidores y con el que se identifican todas las cuentas de sus fans en las redes sociales.

«La vimos muy entera, con los pies en el suelo y consciente de que todo esto se puede acabar en cualquier momento», comenta su padre, un fan más de su hija desde que dio sus primeros pasos en la música. Aunque hubo concursantes que no siguieron el consejo de no ver lo que se comenta sobre ellos en la Red, no fue el caso de Miriam. «Ella dijo: ‘Ya sé que tengo una gente que me quiere y otra que no tanto, por eso no me preocupa’. En eso fue muy responsable y no se quiso alterar», cuenta Ramón. Después de aprovechar para dar un paseo con su novio y responder a alguna pregunta más en la comida de Navidad, cogió el avión de vuelo de vuelta a Barcelona a las 17.10 horas del lunes.

«Cantas impresionante»
Al llegar vio en el sofá de la academia, junto a sus compañeros, la gala especial de Navidad que habían dejado grabada. A ella, por la ausencia de David Bustamante, le tocó cantar Te quiero, te quiero con Javián, otro de los triunfitos de la primera edición. Aunque al principio no se le notaba contenta con el cambio, acabó congeniando a la perfección y, de hecho, Javián se deshizo en elogios hacia ella ensayando y tras actuar. «Me hace mucha ilusión cantar contigo. Lo haces impresionante», le dijo.

En esa misma gala le regalaron un disfraz de teniente O’Neil por su carácter. «Esa seriedad con su carrera le llevó hasta donde está ahora. Al ser joven, se encontró con obstáculos y tuvo que madurar rápido», expresa su padre. El próximo reto será, el martes, Dramas y comedias de Fangoria.
«¡Vivan los leones que estáis ahí apoyándome!»
Antes de subir de nuevo al avión en A Coruña, Miriam aprovechó para dejar un mensaje a sus fans, acompañada de su inseparable león: «Quería aprovechar estos momentos que tuve para pasar en familia, para daros las gracias a todas las personas que estáis ahí día tras día apoyando mi paso por el programa. Que sepáis que me voy con muchísimas fuerzas y muchísima ilusión. Os mando un beso y un abrazo enorme. ¡Feliz Navidad a todos! ¡Vivan los leones y las leonas que estáis ahí apoyándome día tras día!».