El Rotogal se hace mayor sobre el parqué de A Cachada para tumbar al San Sadurniño en el desempate (3-2)

La Voz RIBEIRA / LA VOZ

SAN SADURNIÑO

ELENA FERNÁNDEZ

Los de Adrián Alves se repusieron a verse dos veces por debajo en el marcador

07 dic 2024 . Actualizado a las 22:00 h.

El Rotogal Boiro venció con madurez y calidad a un Intasa San Sadurniño llamado a pelear por el ascenso a la máxima categoría del voleibol nacional. El parqué de A Cachada vio crecer a los jugadores locales y como las conjeturas de la previa quedaron desterradas. Los de Adrián Alves vencieron en el desempate en un partido que ya ha quedado para la galería de las grandes tardes de voleibol vividas en Boiro (3-2).

La igualdad extrema fue la tónica de un choque que empezó con los de Ferrolterra dominando. En gran parte, se apoyaron en la retahíla de errores de saque acumulados por los jugadores boirenses. Casi reacciona sobre el final el equipo local de la mano de un buen Davila que aportó desde todas las facetas. Sin embargo, no pudo evitar la primera derrota parcial.

En el segundo set fueron los de Alves los que empezaron mandando. Un contundente Martín Casais elevó el tono para hacer temblar la defensa visitante, al que los fallos no tardaron en llegarle. El Rotogal sumó el set al marcador y el partido volvió a dar un giro.

De nuevo el Intasa San Sadurniño saltó a la pista convencido y mostró sus mejor cara en saque y en defensa. El capitán Marcos Blanco asumió galones y no titubeó en los momentos calientes para anotarse la tercera entrega del partido.

En el cuarto asalto, Adrián Alves introdujo en la cancha al cafetero Cañate. El bloque funcionó pese a las dudas iniciales y terminó llevando el choque al desempate tras cosechar un agónico 25-22.

En el quinto y último, la figura de Janluar Figueroa vibró desde el saque con la fortuna de su lado. Dos puntos directos, ambos después de rozar el balón en la red, allanaron el camino a los de Boiro. Con el set todavía en el aire hizo acto de presencia Martín Dimitrov con un par de violentos ataques. Un error desde el servicio del San Sadurniño fue la acción definitiva.