Los quince días de fábula en El Paseo: «Nos enamoramos en pandemia y ya creamos el bar más joven de Valdoviño»

Recién nacido y ya coronado. El Paseo cumple poco más de quince días como el bar más joven de Valdoviño. Suficiente tiempo para arrasar tanto en clientes como en redes sociales. Al frente se encuentran Lucía Fontal Bouza y Joan Ramos Serna, de 27 y 26 años que combinan aquí gastronomía gallega y colombiana con futbolines frente al lago de A Frouxeira. La pareja, sentimental y laboral, se ha lanzado sin dudarlo con este local en el que ofrecen hamburguesas, pizzas, arepas, bocatas, mojitos con o sin alcohol, batido, helados... «Nos enamoramos en pandemia y ya hemos creado el bar más joven de Valdoviño», reconocen mientras se marcan llenazos de lunes a domingo.

«Abrimos el 13 de julio, queríamos hacerlo ya en mayo pero se retrasó por las obras», explican. Él ya trabajaba en la cervecería El Gitano y ella en el Horizonte. Pero en realidad se conocen desde pequeñitos, «con nueve años íbamos juntos al colegio». Él se fue una época a trabajar a Canarias y cuando regresó «nos enamoramos aún en pandemia, en octubre hará tres años desde que empezamos la relación». Y hace un año empezaron a trabajar en su gran proyecto personal, «porque a todo el mundo le gustaba cómo funcionábamos en hostelería y al final nos animaron a montar nuestro propio negocio». Se decantaron por este espacio frente al paseo de A Frouxeira, justo frente al lago, «y nos va muy bien porque no esperábamos tanta gente».

Lucía y Joan han llegado para quedarse, más allá de los éxitos del verano. «Tenemos muchísimos clientes de la zona que repiten todos los días, a los chavales de Valdoviño les faltaba un local como éste y también de cara al invierno», indican. Además del bar y la terraza, hay un espacio dedicado a futbolines, billares y dianas.

La carta tiene toques de Colombia, ya que la familia de Joan procede de ese país. «Yo llegué aquí con nueve años, en El Paseo preparamos arepas de carne mechada y sofrito... también hago por encargo empanadas colombianas de carne», apunta. Se trata de un negocio familiar, ya que en la cocina trabaja la madre de Lucía y los fines de semana les ayuda una amiga. «Llegamos con una etapa muy buena para la hostelería de Valdoviño, lo más bonito del sector es que al ser empresaria te entregas más y no te importa echar muchísimas horas», admite Lucía.

Hasta la madrugada

Por semana, las noches llegan hasta las 02.30. Y los fines de semana hasta las 03.00 horas, con sesiones de DJ y sorteos como los de las camisetas que porta esta pareja con el nombre del bar. «Aquí se piden helados, sorbetes, batidos, mojitos, cenitas después de la playa...», enumeran.

La hamburguesa que más triunfa es la Cheddar Boom. Su nombre no llama a engaño: «Extra de queso cheddar, pan brioche, todas las carnes vienen del matadero de Cantalarrana (Narón) que llegan por aquí todos los días». La hamburguesa El Paseo es una completa con huevo, bacon, lomo... Y Joan también ofrece su coctelería, con todo tipo de mojitos o chupitos con o sin alcohol mientras llegan grupos de todas las edades: «Desde los vinos con la gente más mayor a los grupos de jóvenes que se ponen a cenar en la barra más grande de la zona».

Explica Joan que «la carta es sencilla con tres tipos de hamburguesas, cuatro de bocadillos y cinco de pizzas, además de las arepas». Y todas tienen una versión vegetariana, además de emplear pan sin gluten «a petición del público en redes sociales». Abundan los pinchos y para invierno quieren preparar platos más calentitos, como caldo gallego o fabada.

Entre olas y chapuzones, El Paseo ofrece así un buen reconstituyente en Valdoviño: como mojitos con unas arepas, para ver la vida pasar.

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