Fomento ha ejecutado el 37 % del acceso por carretera a Langosteira

Dolores Vázquez A CORUÑA / LA VOZ

FIRMAS

CÉSAR QUIAN

El próximo año se realizará el tramo del enlace con la autopista AG-55

14 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El avance de las obras de la nueva carretera de acceso al puerto exterior, que ejecuta Fomento, es a vista de pájaro una gran pista sin asfaltar. Ha modificado ya la configuración de Suevos y Meicende, pero según los datos facilitados por el ministerio, hasta el momento, se ha ejecutado, en términos económicos, únicamente el 37 %. El coste de la obra se sitúa en 58,5 millones de euros, de los que se han invertido ya 21,6, siendo la anualidad correspondiente para este año 11 millones de euros.

Las obras se iniciaron hace más de dos años, en septiembre del 2010, y se había adjudicado a las compañías Antalsis y Puentes y Calzadas Infraestructuras estableciendo un plazo de ejecución máximo de 23 meses. Ya deberían estar acabadas, pero los plazos se han dilatado y el ministerio retrasó hasta el 2014 su conclusión.

Movimientos de tierras

Desde Fomento se indica que actualmente se «está trabajando en el sostenimiento y revestimiento de los túneles de acceso a la plataforma portuaria (túnel doble con dos tubos de 495 metros de longitud cada uno); a la vez que se trabaja en el movimiento de tierras y en la construcción de muros y estructuras». Asimismo, el ministerio informa de que las obras del enlace entre la futura autovía del acceso al puerto exterior (AC-15) y la autopista AG-55, que une A Coruña con Carballo, se prevén iniciar el próximo año.

Este proyecto supone la construcción de más de 5 kilómetros de autovía que conectará el puerto exterior tanto con la A-6 como con la AG-55. Lo que se plantea en el arranque, con dos vías paralelas a la autopista, que continuarán hasta el peaje de Sabón, mediante ramales de un único carril para pasar después a una autovía de dos.

Estos trabajos, según había avanzado en su día Fomento, conllevan la ejecución de dos viaductos, seis pasos superiores, diez pasos inferiores y cinco muros, así como siete obras de drenaje transversal tipo caño.

Buenas intenciones

El puerto exterior coruñés comenzó en verano a operar sin conseguir que sus enlaces por carretera, en obras, y por tren, todavía sin iniciarse, estén concluidos, pese a que todos los políticos y autoridades que han visitado el nuevo puerto, incluida la ministra de Fomento, Ana Pastor, reconozcan que resultan imprescindibles para que la nueva dársena pueda captar más tráficos.

Para paliar, al menos en parte, estas carencias, la Autoridad Portuaria habilitó un nuevo acceso por carretera al puerto exterior, situado en las proximidades de la central térmica de Sabón y que permite llegar por un viario asfaltado al muelle de Langosteira, que ha recibido ya cinco barcos con mercancías (clínker para Brasil y pontones para Senegal) desde su puesta en funcionamiento. Esta alternativa es imprescindible, ya que el anterior acceso, por la carretera del portiño de Suevos, complicaba mucho cualquier traslado de mercancía.

Más incógnitas plantea el enlace ferroviario, para el que nadie se atreve a poner un plazo de inicio para las obras, aunque se ha ido retrasando su conclusión y ahora la sitúan ya en el 2017, lo que haría que entrara en funcionamiento, al menos, un año más tarde que la fecha fijada para el fin de Langosteira.