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Actitud punk como bandera

Jorge Lamas Dono
jorge lamas VIGO / LA VOZ

FIRMAS

M. MORALEJO

Tras años en un barbecho musical la cantante regresa con Aerolíneas Federales y Heroínas

10 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

«Primero sentí náuseas por los nervios, pero después se me olvidó toda la inseguridad y me sentí como si volviera a casa», afirma Coral Alonso Blázquez para explicar las sensaciones que tuvo aquella noche en Lima, cuando Aerolíneas Federales regresó a los escenarios. Su aspecto angelical esconde a una de las supervivientes de los ochenta vigueses, aquellos años en los que ella sentía «el placer de descubrir cosas nuevas interesantes todos los días».

Coral no ejerce de nostálgica, pero tampoco le importa que la relacionen con la palabra movida. Lo que sí le sorprende es que haya «gente que no me saludó durante años y que venga a hablar conmigo con toda la simpatía del mundo desde que volvimos Aerolíneas». El protagonismo musical le sobrevino sin buscarlo. «Tenía un novio que tocaba la batería en un grupo llamado Batallón Disciplinario y después le ofrecieron tocar en Aerolíneas. Yo iba con él a los ensayos y un día a alguien se le ocurrió que hiciéramos Rosa y yo unos coros en una canción. Les gustó y a partir de ahí, poco a poco, pasamos a formar parte del grupo», recuerda.

Fueron años fecundos desde el punto de vista musical, pero concluyeron con el cambio de década. Después llegaron los estudios y una diplomatura en restauración de bienes culturales por la Escuela de Poio. «Como restauradora trabajé en la catedral de Santiago y en la de Tui, entre otros lugares», afirma Coral Alonso, en cuyo carné de identidad ponía hasta no hace mucho que había nacido en Santa Cristina de Lavadores.

Su rincón ciudadano no es un bello paisaje natural, ni una calle cargada de grandes historias: es el callejón de Núñez. «Se le llamó el callejón de los jevis y fue un centro del movimiento okupa donde se organizaban conciertos. Ahora hay un bar, el Maispalá, que tiene ahí la puerta trasera y una pequeña terraza. Es un espacio tranquilo en medio del ruido de la ciudad, como otros muchos que hay en Vigo. Además hay muchos gatos, que los adoro», se explica Coral.

«Culpa de la Nintendo»

Hace un par de años regresó Aerolíneas Federales, no con el mismo planteamiento profesional del pasado, pero sí con las mismas ganas de disfrutar sobre el escenario. Y Coral volvió a engancharse en el mundo de la música e incluso se incorporó a otro grupo, Heroínas.

Su amplio recorrido le permite calificar de «aburrido» el actual panorama musical y cultural de la ciudad de Vigo. «Hay más bares que programan conciertos que nunca, más teatro, más exposiciones, un Museo de Arte Contemporáneo, otro del Mar, otro de las palabras, otro de los bostezos, pero veo poco talento realmente», manifiesta. Incluso aporta Coral una explicación: «Yo culpo a la Nintendo y a que la inteligencia está censurada en la televisión. Aún así, hay gente que se salva como Fran Alonso, un escritor que no es familiar mío, eh! Me gustan sus novelas y sus poemas», concluye.