
Los «artesanos de la locura» cambian la bata blanca por la música y versionan clásicos como el «Put the blame on Mame», de «Gilda»
06 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Cuatro psiquiatras del Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA) han decidido aplicar la misma terapia que prescriben día a día a algunos pacientes: una buena salud mental requiere una afición extraprofesional. Ellos la encontraron en el jazz y además la comparten. Paula Cores (cantante); Isidro Gómez (batería); Luis González (guitarra y voz) y Luis Vila Pillado (piano) cambian su bata todos los lunes por la tarde por los instrumentos para ensayar con su grupo Foolmakers, que formaron hace un año. El quinto integrante es el bajista Carlos Doval, el único que no es psiquiatra y el que animó a los cuatro a soltarse la melena y a dar rienda suelta a su común pasión.
Para los cuatro psiquiatras la música es una terapia, según asegura el jefe del servicio, Luis Vila Pillado, que los llevará a inaugurar el Festival de Jazz de Lugo, que organiza la asociación Escobijazz. Subirán al escenario del Clavicémbalo en la noche del viernes para ofrecer un concierto.
Terremoto en Triacastela
Algunas de las canciones, grabadas en directo en sus conciertos, ya están colgadas en Internet, como su particular adaptación de la mítica Put the blame on Mame, que canta Rita Hayworth en Gilda. La de Foolmakers se titula Toda a culpa é dela y en ella convierten el terremoto de San Francisco de 1906, al que alude la diva de los años 40, en «cando a terra treme en Triacastela». Esta es una de las favoritas del repertorio.
Cada mes montan tres o cuatro canciones. «O que solemos tocar -asegura el psiquiatra-pianista- son temas clásicos de jazz, adaptados ao galego, cun pouco de sorna, que nos arranxa un amigo».
Vila Pillado reconoce que no se pararon demasiado en darle un nombre al grupo. «Tivemos que decidir rápido e non nos deu moito tempo a buscalo. Penso que Foolmakers é unha verba que non existe. É algo semellante a artesáns da loucura, co que nos identificamos».
Las actuaciones
La de la inauguración del Festival de Jazz de Lugo no es la primera actuación en público del grupo. Ofrecieron un concierto en una sala ourensana y otro en Lugo, en la despedida de un compañero médico en su fiesta de jubilación. Llenaron el aforo.
El primer nexo de unión entre los cuatro psiquiatras fue la especialidad y el servicio del HULA en el que trabajan todos, pero con el paso del tiempo encontraron un segundo, la música. La formación del grupo está directamente ligada a una escuela en la que coincidieron varios, Fábrica de Sons.
Sus fans les han preguntado en numerosas ocasiones por qué no actúan en el psiquiátrico de Calde ante los internos. Por ahora, sopesando los pros y contras de esta decisión, no se han decidido a hacerlo.