Divulga el folclore palestino con un exitoso libro de cuentos
08 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Sharif Kanaana, antropólogo, folclorista, investigador y educador palestino reconocido internacionalmente, promocionó en Santiago, a través de la Fundación Araguaney Puente de Culturas, Cuenta pajarito, cuenta, libro recientemente editado por Ediciones del Oriente y del Mediterráneo. Reúne quince cuentos tradicionales que «datan hace entre 2.000 y 3.000 años. Su origen principal está en la India y en China, y una parte de ellos proceden de Egipto y de Mesopotamia. Son comunes a otros países. Son imaginarios, y muy conocidos», explica Kanaana.
-¿Qué caracteriza estos cuentos?
-Al principio advierten que se entra en un mundo imaginario y usan la fórmula, semejante a los cuentos de hadas, «Érase una vez...». Y cuando finalizan indican que se abandona el mundo imaginario y se vuelve al mundo real. A Europa llegó esta tradición a través de Oriente Medio, la han dado a conocer sobre todo los hermanos Grimm.
-¿Continúa la transmisión de esas historia de padres a hijos?
-Son cuentos para niños y para mujeres, normalmente excluyen a los hombres. Tienen dos niveles: unos para ser entendidos por mujeres y otros específicos infantiles. Hoy tienden a desaparecer, porque la televisión ocupa el tiempo que se destinaba a contarlos, por las tardes. Algunos abuelos intentan recuperarlos para contárselos a sus nietos.
-¿Por qué eligió ese título?
-Es una frase de uno de los cuentos. Y a mayores porque el pueblo palestino lleva mucho tiempo callado, y es como una metáfora para decirle que hable, o que diga, o que cante; que no se calle más.
-Este libro se ha traducido a varias lenguas, ¿qué significa en su trayectoria?
-Además de un libro de cuentos, es una obra de investigación académica sobre el folclore palestino, que se enseña incluso en universidades americanas.
-A usted le premió Yaser Arafat, ¿qué opina de la reciente revelación de que fue envenenado?
-Eso es una novedad en Europa o en América, pero desde el primer momento nosotros ya sabíamos que Arafat fue envenenado, la única duda era saber con qué veneno. Eso nos sirve para conocer el tipo de enemigo que tenemos.
SHARIF KANAANA ANTROPÓLOGO E INVESTIGADOR PALESTINO