Dos cosas parecen evidentes, que el Breogán está un paso por delante del resto de competidores, y que lo que en octubre era una simple sospecha, empieza a ser una realidad. El grupo A era muy superior al B, todos sus equipos se impusieron a los del otro grupo. También desde octubre sabíamos que esta segunda fase era un mero trámite para varios equipos, uno de ellos por supuesto, el Breogán. Cuando de diez participantes se clasifican siete para los play off la emoción hay que buscarla en lograr una buena clasificación en post de un factor cancha favorable. Que haya o no público también va a influir. Dar al Breogán por favorito es un sentimiento unánime en Lugo y fuera de Lugo, pero conviene empezar a pensar en la trampa que supone para el favorito unas eliminatorias en las que hay que lograr dos triunfos para seguir adelante.
Un play off es una competición que tiene muy poco que ver con la liga. La liga te permite ver un horizonte a largo plazo y puedes subsanar errores, recuperar lesionados e incluso mejorar estados de forma. En un play off es todo frenético, solo hay tiempo para ganar sino quieres verte en la calle, y todo va en contra del favorito, porque el margen de corrección es mínimo.
El formato es el siguiente: Primer partido en casa del mejor clasificado, segundo fuera y tercero en casa si es necesario. Este formato convierte el primer partido en una bomba, no cabe el error, afrontar el segundo 0 a 1 es difícil de explicar si no se ha vivido. Un año de triunfos, un año de felicidad hay que jugárselo a cuarenta minutos con todo en contra y ahí hacen falta los buenos jugadores, sin duda, pero en esa batalla suelen hacer su aparición héroes inesperados.
Con el equipo a buen nivel y sumando victoria tras victoria, el ambiente de euforia es total, pero todo lo sucedido y lo que seguirá sucediendo hasta el final de esta segunda fase, no lo olvidemos, no garantiza en absoluto el ascenso. En un play off, tanto como el buen juego, cuenta el corazón, saber templar los nervios, que no te coma la angustia. El Breogán no solo parece el mejor, sino que lo es transformar esa superioridad en un ascenso será muy duro.