La absoluta superioridad en el juego interior permitió a la Penya controlar y dominar un partido en el que McLemore volvió a ser el mejor celeste
03 mar 2024 . Actualizado a las 12:36 h.El Río Breogán reanudó su carrera por la permanencia en la Liga Endesa dejando pocos motivos para la esperanza. Partido más que discreto en el Olímpico de Badalona y otra derrota frente a un Joventut que tuvo siempre la situación bajo control gracias, principalmente, a su notable superioridad en el juego interior. En el Breo volvió a destacar Ben McLemore, Rob Gray causó una buena impresión en su estreno y Anthony Polite fue el jugador descartado por Veljko Mrsic.
Martynas Sajus superó a Ante Tomic en el salto inicial y Toni Nakic inauguró el marcador desde el tiro libre. Ben McLemore, con un triple, estiró la ventaja y el Joventut replicó con un parcial de 7-0. McLemore era un filón anotador en el equipo lucense. El alero estadounidense convirtió dos lanzamientos más desde fuera del arco del 6,75 y a poco menos de cuatro minutos se fue al banquillo y dio el relevo a Rob Gray, que debutaba con la camiseta celeste. El partido era áspero. Las defensas eran intensas y encontrar tiros liberados era un suplicio en las dos partes del campo. Del 7-10 que reflejaba el marcador cuando McLemore dejó el choque se pasó al 14-10. Otro parcial de 7-0 al que Veljko Mrsic reaccionó solicitando su primer tiempo muerto. Su equipo espabiló, Gray convirtió su primer triple como breoganista y la primera manga concluía con una insignificante de la Penya, que se estaba mostrando superior en el poste bajo.
El segundo cuarto
Sergi Quintela fue el base celeste en el inicio del segundo cuarto, McLemore volvió enseguida a la cancha y fue Stefan Momirov quien anotó los primeros puntos para el Breo en este período. Con su dominio en la pintura y el buen porcentaje en los triples, el conjunto verdinegro iba despejando poco a poco su camino. Sin demasiados alardes, fabricó una renta de 11 puntos (30-19) merced a otro parcial de 7-0 y Mrsic optó de nuevo por parar el duelo pese a que Sergi García había zanjado la sequía. Nada cambió. El Joventut no cedía la iniciativa, seguía teniendo la situación bajo control y el Breo solo McLemore mantenía el tipo en el apartado anotador. Los lucenses afrontaron el último tramo del segundo acto con McLemore y Gray justos sobre el parqué por primera vez en el partido, pero solo el segundo engordó su cuenta particular y el Breo se fue al descanso con una desventaja de 10 puntos: 40-30.
El conjunto breoganista reanudó el encuentro con el quinteto inicial. Se vislumbró una reacción, pero Tyler Cook seguía campando a sus anchas en la pintura y sostenía a un Joventut que un parpadeo volvió a recuperar una renta de 10 puntos (48-38). Nueva llamada al orden de Veljko Mrsic y otra vez la batuta para Sergi Quintela como solución. La reprimenda surtió efecto, puesto que el Breo se aproximó en el marcador (52-46) con un triple de Matas Jogela. Pero la cosa se quedó ahí. Fue solo un pequeño susto para un Joventut que se recompuso de inmediato y volvió a poner tierra de por medio apoyado en su absoluto y abrumador dominio bajo los tableros y la calidad individual de muchos de sus hombres, y favorecido por las imprecisiones visitantes. Con solo un cuarto por delante y visto el desarrollo del partido, se antojaba difícil imaginar una remontada breoganista: 60-49.
Demarraje definitivo
Las opciones visitantes se esfumaron prácticamente por completo en el arranque del período definitivo. Parcial de 8-3 en solo dos minutos y medio y la ventaja local crecía hasta los 16 puntos (68-52). El triunfo ya parecía inalcanzable, pero los celestes no se rindieron. Voluntad había, pero no armas para desactivar al Joventut, que mantenía su ritmo anotador y no permitía al Breo coger impulso para reengancharse. La última baja de Mrsic fue Erik Quintela, que entró por primera vez en acción recién superado el ecuador del último período.
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Finalmente no hubo milagro y el Breogán encajó otra derrota que lo mantiene en los puestos de descenso a la espera de recibir al Unicaja en el Pazo, el próximo sábado a partir de las seis de la tarde.