El equipo lucense aspira a zanjar su permanencia en la ACB ante un Andorra ya a salvo, que promedia 92 puntos por partido en el último mes y medio
09 may 2024 . Actualizado a las 21:08 h.Ganar y festejar, o esperar. Son los destinos que le esperan al Río Breogán en la penúltima jornada de la Liga Endesa. El triunfo ante el MoraBanc Andorra este viernes (20.00 horas, Movistar Deportes 4) le otorgaría la permanencia matemática y desataría el éxtasis en el Pazo, mientras que una derrota lo condenaría a aguardar por el resultado del Granada en su partido en la cancha del Zaragoza, que arranca media hora después. Si los granadinos caen, también habrá fiesta en Lugo.
Para zanjar la salvación por la vía rápida el Breo necesita tumbar a un enemigo que no expone más que orgullo y desatado en el aspecto anotador. A las órdenes de Nartxo Lezkano, el técnico breoganista en el ascenso a la ACB en el 2018, el Andorra ha disparado notablemente su producción ofensiva en el último tramo de la competición. En los últimos siete partidos nunca se quedó por debajo de los 80 puntos y su promedio es de 92,1, lo que pone en alerta a un equipo lucense que deberá volver a hacer gala de su eficacia en defensa, la tercera mejor del campeonato.
Esa explosión en ataque le sirvió al Andorra para vencer al Zaragoza (85-80), al Granada (88-62), al Baxi Manresa (90-97) y al Barcelona (108-92), si bien fue insuficiente en sus choques ante el UCAM Murcia (99-86), el Gran Canaria (97-92) y el Obradoiro (101-89). Salvo sorpresa, el conjunto andorrano comparecerá en el templo breoganista con todo su arsenal, donde Jean Montero, Jerrick Harding y Marin Maric son los primeros espadas.
«Ahora es más importante que nunca tener los pies en el suelo», avisa Mrsic
«Ahora es más importante que nunca tener los pies en el suelo. Llevamos mucho tiempo jugando con esta presión. Se habla mucho de que son finales, pero el equipo está respondiendo, jugando muy bien al baloncesto en los últimos dos meses. Ahora el mayor problema puede ser un exceso de relajación después de la fiesta que se montó tras la última victoria». Este fue el mensaje principal de Veljko Mrsic para sus jugadores en la víspera de un partido que puede valer la permanencia en la ACB. El entrenador del Breo insistió en ello mirando atrás: «No podemos olvidarnos de dónde estábamos hace dos semanas, eso siempre lo tenemos que tener en nuestras cabezas».
La batalla es el Pazo y eso es una ventaja, tal y como reconoce el estratega croata. «Ahora más que nunca necesitamos de esa sinergia entre equipo y afición», afirmó, añadiendo a continuación: «Seguro que se nota que este partido es una final, pero también que estamos a final de temporada y eso puede afectarte tanto positiva como negativamente. Personalmente, confío en que solo nos afecte de manera positiva».
«Salir a tope y dar todo lo que tenemos» será, según Mrsic, una de las claves para derrotar a un Andorra con «diez o doce jugadores muy buenos, con mucho talento ofensivo». De entre todos destacó a Montero y Harding y también a su compatriota Marin Maric. «Lo conozco bien, claro. Fui yo quien lo convocó para el equipo croata cuando era seleccionador», señaló Mrsic, que no espera bajas pese a los problemas físicos de algunos jugadores.