La fiesta de este primer derbi gallego se vivió desde la hermandad desde media hora antes del encuentro. Salió arrollador el Río Breogán, con un parcial de 18-3 a falta de dos minutos del primer acto. Los ajustes de Epi en defensa y una mayor jerarquía en el rebote, sobre todo el ofensivo, llevó el encuentro a la igualdad al inicio del segundo cuarto: 24-22. Comenzaba un nuevo encuentro con un guion de igualdades en el marcador que se resolvió para el equipo lucense en un ambiente fantástico de baloncesto.
El club lucense, con carencias en el rebote ofensivo y un buen 68 % de acierto en los tiros de dos, por 48 % del equipo coruñés, supo bajar al barro y ser diferencial en defensa. En el último cuarto, con anotaciones de líder de Hillard desde la esquina, la dirección de Mavra, la aportación de Grant y un Sakho con sus mejores estadísticas en la ACB, sin fallo en tiros de dos (8/8) y 9 capturas, hicieron inclinar la balanza para el equipo lucense.
El Río Breogán durmió decimotercero tras 4 victorias en los últimos siete partidos, los que lleva el nuevo técnico al frente. Descansen, pónganse cómodos y disfruten. Este Río Breogán con la dirección de Luis Casimiro ilusiona.