Cae todo un clásico víctima del «streaming»

Fernando Molezún LA HABITACIÓN DE DIÓGENES

FUGAS

27 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La verdad es que no es noticia. Cuando algo ocurre con demasiada frecuencia deja de ser novedad para convertirse en costumbre, y eso es lo que ha pasado con el cierre de tiendas de discos tradicionales, de esas que vivieron una época dorada con la conversión del formato elepé en el rey de la industria musical, que resistieron los vaivenes del sector en los inicios de la era digital y que, finalmente, no han podido resistir la desidia de la generación emepetrés. Es el caso de Shake, Rattle and Read, tienda de Chicago que lleva 50 años nutriendo de alimento para el coco a sus clientes y que, según cuenta su propietario, Ric Addy, ha sucumbido ante «un mundo basado en el streaming». Cierra mañana sus puertas para siempre y, en un último intento de «evitar tirarlo todo a la basura», Addy ha decidido abrir la tienda un par de días esta semana para que todo aquel que acuda con bolsas pueda llevarse todo lo que quiera o lo que pueda cargar. Una decisión tan sorprendente como comprensible, viniendo de un tipo que ha consagrado su vida a algo que no quiere que se pierda.