El tiempo pasa para todos, pero sin duda unos lo llevan mejor que otros y si eres rubio, de ojos azules, guapo y destilas encanto a lo mejor lo tienes más fácil. Es el caso del galán de galanes, Robert Redford, que el domingo cumple 83 años, pero para la revista Vogue, la biblia de la moda, sigue siendo el más estiloso de Hollywood. Porque la edad para Redford es un simple número. Prueba de ello es su vuelta a la pequeña pantalla de la mano de la serie Watchmen, en la que se meterá en la piel de su tocayo, el presidente Robert Redford. Puede que este sea su último papel [había anunciado su retirada a principios de este año], pero si así es, poco importa porque a sus espaldas nos deja un buen número de películas, de esas que uno no se cansa nunca de ver.
Uno de esos títulos es Tal como éramos, en el que Redford y Barbra Streisand mostraron a una pareja enamorada hasta la médula, pero consientes de que su amor nunca llegaría a buen puerto. Hasta Carrie Bradshaw se sintió identificada con Katie en Sexo en Nueva York y repitió con Mr. Big esa pasional caricia de despedida a Hubbell. Igual de intensa fue la relación que vivimos con Redford y Meryl Streep en Memorias de África. Antes, el actor ya había conquistado al público con otro sex symbol, Paul Newman, en Dos hombres y un destino. Y el sino de Redford era seguir triunfando. Después llegaron otras joyas como El Golpe o El Gran Gatsby. Sin embargo, el actor tuvo que ponerse detrás de las cámaras para que la Academia lo reconociera con un primer Óscar por su ópera prima como director, Gente Corriente en 1980. Más tarde, en el 2002, enmendaron ese error otorgándole un premio honorífico por una trayectoria en la que también hay películas en las que mostró su ideario político.
Fuera de Hollywood, Redford es conocido por su labor como activista medioambiental. Porque El hombre que susurraba a los caballos encarna al auténtico gentleman, dentro y fuera de la pantalla, tenga la edad que tenga.