Cantando en catalán, Manel han conseguido cuatro números 1 en ventas en España, la crítica los adora y los festivales se los rifan. Ustedes mismos
25 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Cuatro músicos que no van de nada, a los que resulta complicado, si no imposible, adscribir a una etiqueta. Ni siquiera a una estética. Hacen la música que en cada momento les sale con dos únicas premisas: cantada en catalán y con una profunda carga poética. Así son Manel. Y qué bueno que existan. Y que vengan. Hablamos con su bajista, Martí Maymó.
—En «Tipo suite» decís: «Hacia el 2000 se me secó el cerebro de tanto escuchar indie deprimente». ¿Fue para tanto?
—Nosotros fuimos los últimos coletazos de aquel momento en el que el indie fue una revolución. De cuando escuchábamos a Chucho, Los Planetas, Nacho Vegas... Y claro, había mucho indie deprimente, que te va muy bien cuando recién salido de la adolescencia necesitas canciones que estén de tu lado. Pero a estas alturas está bien reírse un poco en las canciones de uno mismo y de tus personajillos del pasado.
—¿Se ha impuesto un sentido más lúdico de la música?
—No lo sé. Seguro que hoy también habrá veinteañeros escuchando canciones superdeprimentes. Gran parte del trap lo es. Supongo que a aquellos que empiezan a soñar con irse de casa de sus padres y empezar una vida nueva les pasará con el trap lo que a nosotros nos pasó con el indie.
—Un detallazo publicar vuestras letras en la web y en varios idiomas.
—Nosotros le damos mucha importancia a las letras, nos rompemos mucho la cabeza con ellas. Y teniendo en cuenta que el consumo de la música pasa ahora por no tener soporte físico, nos pareció una buena solución para que la gente que nos escucha pueda tener a mano nuestras letras.
—Y para un grupo que da tanta importancia a las letras, ¿hasta qué punto os limita el cantar en catalán?
—Nunca nos ha limitado. Pensaba estos días en lo que pasado con la película de Carla Simón. Ir a Berlín con una película en catalán y ganar. Seguramente habrá habido productores que no hayan querido producir esa peli. Que le hayan dicho que tenía que ser en español. Pero ella ha seguido adelante con su proyecto, porque la película que quería hacer no tenía sentido que se hubiera hecho de otra forma o en otro idioma. Y mira el resultado. A ella el catalán no le ha limitado para ganar el festival. Detrás de que nuestros discos sean en catalán no hay ningún posicionamiento. Simplemente somos cuatro personas que la mayoría del tiempo y entre nosotros hablamos en ese idioma.
—En Galicia está pasando algo parecido gracias a Tanxugueiras.
—Yo tengo la sensación de que hay un gran momento para la música en lenguas minoritarias. Ya no hay complejos a la hora de cantar en un determinado idioma. Tanxugueiras es un buen ejemplo. Es más, estoy convencido de que muchísima gente ni se entera de que están cantando en gallego. Me alegro muchísimo por ellas. Que, no sé por qué, pero me caen superbién.
—A Galicia nos llegan bastantes grupos catalanes, pero no sé si ese flujo lo hay también en la dirección inversa.
—Sí que nos llegan cosas de Galicia. Novedades Carminha o Triángulo de Amor Bizarro no creo que suenen menos en Cataluña de lo que suenan Manel o Mishima ahí.
—Ya, pero justo los dos que citas cantan en español.
—Bueno, poco a poco. Quizá es porque nosotros hemos tenido unos referentes antes que los grupos gallegos no tuvieron. Nosotros tuvimos la suerte de que nos miramos en artistas, como Sisa, que hacía años que ya cantaban en catalán en toda España. Es muy importante que las generaciones anteriores te den señales y te abran el camino. Igual que nosotros, que ya llevamos 15 años, hemos podido ayudar a grupos que han venido por detrás.