Manuel Indiano llevaba seis meses en el cargo y había renunciado a la escolta Manuel Indiano Azaustre, de 29 años, un independiente que accedió al puesto de concejal por las listas del Partido Popular en el Ayuntamiento de Zumárraga (Guipúzcoa) hace sólo seis meses, fue asesinado ayer por pistoleros de ETA, que le acribillaron a balazos en el interior de la tienda de su propiedad. La víctima era natural de Madrid y vivía desde hace sólo tres años en Zumárraga, junto a su compañera sentimental, de la que esperaba una hija. Su relación con la política era circunstancial. Sólo había aceptado figurar en la lista y a ser suplente temporal. Renunció a la escolta porque le agobiaba.
29 ago 2000 . Actualizado a las 07:00 h.El atentado ocurrió sobre 10.20 horas de la mañana, en la tienda de golosinas que Manuel Indiano Azaustre y su hermana habían inaugurado en la calle de las Islas Filipinas hace sólo dos semanas y que todavía se encontraba en obras. El concejal acababa de abrir su negocio cuando una o dos personas entraron en el local y le descargaron trece disparos en el tórax y el abdomen. Una pareja de la Policía Municipal de Zumárraga, alertada por los transeúntes acudió al lugar y encontró a Indiano tendido en un charco de sangre. Según el parte médico facilitado, Manuel Indiano presentaba «parada cardiorespiratoria y múltiples orificios de bala en el abdomen y torax». Durante media hora, se le realizaron maniobras de «resucitación cardio-pulmonar», pero sin resultados. Finalmente se certificó su defunción sobre las 11 horas, por cuatro disparos en el pecho y tres en el abdomen. Poco después de esa hora ingresaba en el mismo hospital la compañera sentimental del fallecido, Encarnación Carrillo, embarazada de siete meses, que sufrió un ataque de nervios al conocer lo ocurrido. Los médicos temieron que se adelantara el parto o que el feto sufriera los efectos del choque anímico sufrido por la madre. Sin embargo, los exámenes permitieron asegurar la continuidad del embarazo y la mujer quedó ingresada en observación y se encuentra sedada. Investigación Los expertos de balística de la Ertzaintza trabajan sobre los doce casquillos recogidos en la tienda de Manuel Indiano, para cotejar las muescas dejadas por el arma y compararlos con los empleados en otros atentados. Un examen preliminar revela que los casquillos encontrados en el lugar del crimen eran de dos marcas diferentes. Según las primeras hipótesis policiales, el asesinato del concejal popular puede ser obra de integrantes del complejo Donosti, un grupo que ha superado la categoría de «comando» y sobre el que pesan los recientes asesinatos del presidente de la patronal guipuzcoana José María Korta y del ex gobernador civil de Guipúzcoa, Juan María Jáuregui. Los dueños de establecimientos próximos no escucharon las detonaciones y sólo supieron del atentado cuando la Ertzaintza acordonó la zona. El concejal renunció a tener escolta, pese a la alerta de las fuerzas de seguridad y del PP, porque se sentía agobiado. Accedió a formar parte de las listas del partido a las elecciones municipales del 13 de junio del año pasado a petición de un amigo y sólo en calidad de independiente en el número seis de la lista. Quería dejar la política porque no se sentía identificado con ella. Tras conocerse el atentado, se desplazaron hasta la localidad guipuzcoana representantes de las instituciones vascas y de los partidos políticos democráticos, entre los que se encontraban el presidente regional, Carlos Iturgaiz; la presidenta provincial, María San Gil; el lehendakari, Juan José Ibarretxe; el portavoz del ejecutivo autónomo, Josu Jon Imaz; el diputado general de Guipúzcoa, Román Sudupe, y el presidente de las Juntas Generales de la provincia, Iñaki Alkiza.