«Moraima», de Milladoiro y Ana Belén, fue elegida como la mejor canción en gallego Ocho menos cuarto de la noche. La V Edición de los Premios de la Música está a punto de comenzar en el pabellón Raimundo Saporta de Madrid. En la televisión tardará todavía dos horas en empezar con el truco del «falso directo». La sala de prensa está atestada de reporteros tan ávidos de noticias como de pinchos de tortilla. Los premiados: Carlos Cano, Alejandro Sanz, Alberto Cortez y Ricky Martin. «Moraima», de Milladoiro, fue elegida mejor canción en gallego, y el álbum de Evia, mejor disco folk.
24 mar 2001 . Actualizado a las 06:00 h.Poco después de las ocho de la tarde comienzan las breves ruedas de prensa con la presencia de Rosa León y, a continuación, Paco Pérez-Bryan, que acaba de recoger el premio al mejor programa musical de televisión por Los conciertos de Radio 3. Un periodista dice que Pérez-Bryan (pareja de la gallega Luz Casal) es clavado al actor Javier Cámara. También recoge su premio La Gramola, como mejor programa musical de radio. Milladoiro, cuyos componentes están de concierto en otro lugar, son galardonados por Moraima, tema que canta Ana Belén con el grupo gallego, la mejor canción en gallego. Suenan mil móviles, o más. Durante un interludio publicitario, las cámaras enfocan a las fans que se apretujan contra las vallas de protección. Por fin, salen Paz Padilla y Pablo Carbonell, los presentadores de la gala, anticipando la actuación conjunta de Ricky Martin, Estrella Morente, Ketama y Echegaray. Candidatos ausentes Alejandro Sanz es nombrado mejor artista pop, pero Sanz está de gira por México, así que recoge su premio-bocina Gabino Diego, muy simpático entre bastidores. Hay otros candidatos ausentes sin la coartada de Alejandro; un representante de una compañía de discos dice que «no compensa hacer venir a todo el mundo, porque si no sabes si van a ganar, igual vienen para nada». «Ya -contesta uno- pero eso pasa con todos los premios, ¿no?». Y la respuesta es que no. Al parecer, otros eventos similares filtran el nombre de los ganadores poco antes de la gala, pero la pulcritud de la organización de los Premios de la Música (están organizados por la Sociedad General de Autores y Editores y Asociación de Intérpretes y Ejecutantes,) resulta enojosa a algunas disqueras, que, ante la incógnita, optan por dejar a sus artistas en casa. En el pabellón Raimundo Saporta, Estopa y Chonchi Heredia se marcan, cómo no, una rumba. Con el público embrutecido, Sabina y Mª Dolores Pradera homenajean a otro de los premiados, Carlos Cano, y Ricky Martin hace pareja musical con Ketama. En el recinto el ambiente es televisivo porque esto es también un programa de televisión. Hay multitud de focos. Todo muy bonito. La gente se divierte y, a la vez, forma parte del espectáculo.