El Poder Judicial examina la sentencia de Loli Vázquez

La Voz

GALICIA

R. T. CRÓNICA La familia de la gallega que fue condenada por el crimen de Rocío Wannikhof sostiene que los jueces pudieron actuar por motivos de «exclusión sexual»

27 feb 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

A familia de Dolores Vázquez, principal sospechosa del asesinato de Rocío Wannikhof, no se rinde. Hace dos semanas presentó una denuncia ante el CGPJ al considerar que en la incriminación de Loli pudieron pesar motivos de «exclusión o segregación sexual». No obstante, según informaron fuentes del propio CGPJ, la actuación de los inspectores no presupone que se vaya a realizar una investigación profunda al respecto, ya que acordar esa medida es competencia de la Comisión Disciplinaria, que se reunirá el próximo martes. Los vocales del Poder Judicial deberán determinar si existe material suficiente para incoar diligencias informativas o, por el contrario, procede el archivo de las pesquisas abiertas al no haber sospechas de que se haya producido un hecho contrario a las normas. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ordenó el pasado día 1 la repetición del juicio del caso Wannikhof, al anular por falta de motivación la condena de 15 años de cárcel impuesta a Dolores Vázquez como supuesta asesina de la joven Rocío. Aunque dicho fallo no suponía su absolución, los mismos jueces pusieron en libertad bajo fianza de 30.000 euros (unos 5 millones de pesetas) a la acusada debido al largo tiempo que llevaba en prisión preventiva y a la no existencia de un importante riesgo de fuga. El abogado defensor de Dolores Vázquez declaró entonces que la instrucción se había hecho «de mala manera», y reveló que la Guardia Civil ha reabierto sus pesquisas para aclarar algunas «incógnitas», como el cambio de ropa en el cadáver de Rocío. Por su parte, las hermanas de la principal sospechosa denunciaron ante el CGPJ que los jueces que investigaron el caso en Fuengirola y Málaga «actuaron bajo motivaciones absolutamente ajenas al caso, razones de exclusión o segregación sexual» que, según ellas, supusieron un «linchamiento inadmisible». Año y medio de cárcel Dolores Vázquez consiguió regresar a su chalé El Retiro, en la urbanización malagueña de El Chaparral, el pasado 8 de febrero, justo un año y cinco meses después de que la Guardia Civil la sacara de su casa con las esposas puestas. Loli tiene ahora la obligación de comunicar cualquier cambio de domicilio superior a 24 horas y debe comparecer una vez por semana en el juzgado más próximo al lugar donde fije su residencia.