Los cinco detenidos en A Coruña operaban en toda España Entretenían con cualquier excusa a los empleados o clientes de bancos para robarles
14 sep 2002 . Actualizado a las 07:00 h.La banda estaba formada por tres hombres, una mujer y su hijo de 15 años. Todos sudamericanos, de Colombia y Venezuela. La policía no les perdió el rastro desde que dos de ellos se hicieran con un botín de 3.000 euros en un banco de Madrid el pasado julio. Los siguieron hasta A Coruña porque querían capturar a la banda entera. Para ello desplegaron agentes de paisano por las principales oficinas de la ciudad, atentos a sus movimientos. Y el viernes pasado los detuvieron con las manos en la masa, junto a la oficina principal de un banco en la zona del Obelisco. Antes de arrestarlos, los miembros de la Policía Judicial de Madrid y A Coruña no les perdieron de vista durante toda la mañana. Entraban por separado en las sucursales, no realizaban ningún movimiento y volvían a reunirse en la calle para cambiar impresiones. También utilizaban móviles para comunicarse. Buscaban la víctima propicia para el éxito de la operación, que lo mismo podría ser el empleado de una oficina bancaria como un cliente. Cuando ya tenían en el punto de mira la oficina en la que actuar, uno de ellos se percató de la presencia policial, por lo que los agentes pasaron a detenerlos. Son especialistas en el hurto «al descuido». Sus mañas las pasearon por varias ciudades españolas, como Madrid, Barcelona y Málaga. El modus operandi consiste en entretener a la víctima con una pregunta, una caída o un empujón para quitarle la cartera, si es cliente del banco, o echar la mano a la caja, si es empleado. Con tal rapidez y precisión, que los robados no se enteran.