El precio del dispositivo para pagar sin parar rondará los 30 euros Caixanova gestionará el servicio y distribuirá el transmisor entre los usuarios
19 jul 2003 . Actualizado a las 07:00 h.Los usuarios de la A-53 (Santiago-Ourense) podrán utilizar a partir del martes el telepeaje que permite abonar la tarifa sin detener el vehículo en las cabinas de pago de la autopista. El dispositivo de cobro automático y su funcionamiento serán idénticos al que desde el pasado 9 de abril permite transitar por la A-9. De hecho, los clientes de Audasa que ya tengan los transmisores para la Autopista del Atlántico también podrán emplearlo en la nueva vía. Para ello, la concesionaria de la primera fase de la A-53, Autopista Central Galega (Acega), llegó a un acuerdo con Caixanova, que ya gestiona el telepeaje en la A-9. La entidad financiera distribuirá entre los que lo soliciten, con un coste de 30 euros, el dispositivo que deberán colocar en el parabrisas. A 40 por hora Al entrar el automóvil en la zona de cobertura, un lector de código graba los datos del usuario y los transmite a su cuenta bancaria. El conductor deberá pasar por las vías señalizadas con una T (en los extremos del peaje) y reducir la velocidad a 40 kilómetros por hora. Acega descartó distribuir dispositivos gratuitos (Audasa repartió 30.000 para promocionar el sistema en la A-9), algo demasiado costoso para una vía que sólo lleva siete meses en servicio y que tiene abiertos al tráfico 33,6 kilómetros, entre Santiago y Silleda. La A-53 cuenta en ese trayecto con un tráfico medio diario de 3.700 vehículos. La concesionaria prevé completar en diciembre el trazado hasta Lalín, y en el 2004, hasta el Alto de Santo Domingo, en el municipio pontevedrés de Dozón. Los 31,8 kilómetros finales hasta enlazar con la Autovía das Rías Baixas en Barbantes los ejecutará una sociedad pública constituida por la Xunta. Esa obra, que tiene fijado un presupuesto de 180 millones de euros, se financiará con un préstamo del Banco Europeo de Inversiones (BEI) de 90 millones y aportaciones de la Administración autonómica y de entidades financieras gallegas. La previsión es que el trazado hasta Ourense esté listo a finales del 2005.