El memorial de la discordia

Barbara Celis D'Amico

GALICIA

El proyecto elegido para el monumento a las víctimas del 11-S no gusta ni a los neoyorquinos ni a los familiares de los fallecidos por ser demasiado «frío»

07 ene 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

«La crítica principal es que se trata de un diseño demasiado frío, inhóspito, angular». Así definía Kent Barwick, director de la Municipal Art Society, el proyecto con el que Nueva York recordará a los caídos durante los atentados del 11-S. Dos piscinas hundidas que ocuparán la silueta dejada por cada torre del World Trade Center y que reflejarán el vacío dejado por las víctimas de los atentados en una gran plaza adoquinada y llena de árboles donde también habrá espacio para la contemplación. Así será Reflecting Absence, firmado por el arquitecto Michael Arad con la colaboración del paisajista Peter Walker, título del memorial que finalmente fue elegido el martes entre ocho finalistas, tras meses de polémicas a las que la elección no parece haber puesto punto final. Según Barwick, representante de una de las diversas instituciones culturales que han realizado encuestas entre los neoyorquinos para conocer la aceptación de los proyectos, ninguno de los ocho memoriales finalistas consiguió calar en el corazón de los ciudadanos, y mucho menos en el de las familias de las víctimas, que llevan quejándose desde que se anunciaron los nombres de los ocho aspirantes el pasado 19 de noviembre. Sin restos de las torres «Estamos muy decepcionados porque han decidido escoger un proyecto a pesar de todas nuestras quejas», afirmaba ayer en The New York Times Anthony Gardner, portavoz de la Coalition of 9/11 Families. Incluir restos de los edificios caídos en el memorial era uno de los puntos irreconciliables entre arquitectos y familiares, quienes se han quejado de que todos los memoriales finalistas eran demasiado fríos y ni siquiera tenían un espacio grande para poner los nombres de las víctimas. «Por eso daba igual quién ganara. Ninguno de los finalistas incorporaba piezas de las torres. Yo creo que ha llegado el momento de que se organice otra competición», aseguraba Gardner. Sus deseos, respaldados públicamente hace unas semanas incluso por el ex alcalde Rudolph Giuliani, serán difíciles de cumplir ya que la elección de Reflecting Absence ha sido tan dura y disputada que difícilmente los 13 jueces encargados de elegir entre las más de 5.201 propuestas de 63 países querrán volver a empezar. «En su potente pero sencilla articulación de las huellas de las Torres Gemelas, Reflecting Absence ha convertido ese vacío dejado por la destrucción de las torres en el símbolo de la pérdida. Aunque esos huecos quedan vacíos e inconsolables, el diseño de la plaza que los envuelve incluye grupos de árboles que tradicionalmente simbolizan la vuelta a la vida», se afirma en el comunicado del jurado. «Es sencillo y audaz» Sin embargo, aunque ayer se dio a conocer el nombre del ganador, el proyecto final aún no ha sido mostrado y dista mucho del presentado inicialmente por los elegidos, según asegura el jurado. «Se han realizado cambios significativos que serán desvelados públicamente la próxima semana», dijo el martes. En principio, el edificio-muro que aparece en la maqueta habría caído del proyecto final, según fuentes de The New York Times . Su presencia no era del agrado del arquitecto Daniel Libenskind, autor del proyecto total de reconstrucción de la zona cero en la que dejó el espacio para un memorial que precisaba de su aprobación para salir adelante. «Es sencillo y audaz», proclamó Libeskind el día en que se conoció al ganador. Habrá que esperar a la próxima semana para ver si los neoyorquinos están de acuerdo con él o vuelven a rechazarlo.