Asegura que a la Xunta le preocupa que el nuevo Ejecutivo socialista «pueda quitarnos lo que ya tenemos» Dice que el objetivo de su Gobierno es que se cumpla «tal como está».
25 mar 2004 . Actualizado a las 06:00 h.?anuel Fraga acusó ayer al PSOE de pretender «reducir» el programa de infraestructuras comprometido por el Gobierno en el Plan Galicia para favorecer los «compromisos que pueda haber en este momento con otras regiones, como Cataluña o Andalucía», las dos con mando socialista. El presidente interpretó las valoraciones del PSOE gallego sobre la supuesta falta de fondos europeos para financiar el tramo de entrada del AVE en esta comunidad, entre Lubián (cerca de O Padornelo) y Ourense, como una «mera disculpa para crear confusión en una infraestructura primordial para Galicia». Fraga, que la semana pasada advirtió de que defenderá «con uñas e dentes» los intereses de Galicia» ante el Gobierno socialista, fue tajante al ratificar la posición del Ejecutivo autónomo. Apuntó que el «objetivo principal» que se ha marcado la Xunta en su relación con el futuro Gabinete de Rodríguez Zapatero es «que el Plan Galicia se cumpla tal como está en este momento». Recalcó que la Xunta tiene los compromisos atados y previno contra posibles intentos de rebajar las actuaciones previstas. «Nosotros estamos en este momento en regla. Que nadie la quiera romper», advirtió Fraga. La financiación del AVE El jefe del Ejecutivo confesó su preocupación por que «puedan quitarnos lo que ya tenemos. Pero eso sería muy fuerte», matizó. Fraga ironizó también con el interés del PSOE gallego por la financiación de las infraestructuras aprobadas por el Gobierno a raíz de la catástrofe del Prestige . «Primero decían que el Plan Galicia era pequeño. Después dijeron que era fume. Y ahora resulta que de lo que se trata por parte de algunos es de ver cómo lo reducen, aparentemente. Espero que eso no sea así. Quiero confiar en que no sea así», exclamó Fraga. En cuanto a la disposición de fondos europeos para el tramo Lubián-Ourense del AVE, explicó que «nunca se pensó que se hiciera totalmente con fondos europeos, sino que tuviera ayudas europeas». Según Fomento, el 80% de las inversiones se financian con fondos del ministerio y sólo el 20%, con ayudas comunitarias. Fraga comentó que él mismo negoció con la comisaria europea de Transportes, Loyola de Palacio, la inclusión de la alta velocidad en Galicia entre los proyectos europeos prioritarios. Esa negociación cristalizó en la firma de un convenio con Fomento, en el año 2000. Pero ese acuerdo sólo contemplaba la adaptación de la vía única actual para que pudiera ser utilizada por trenes de alta velocidad. La solución cicatera de Fomento sólo garantizaba velocidades máximas de 140 kilómetros por hora, lo que situaba las conexiones entre las ciudades gallegas y Madrid en el entorno de las 4 horas. Fraga recordó que ese convenio «ha sido superado por el Plan Galicia», que autorizó un nuevo trazado entre Lubián y Ourense con doble vía y un presupuesto que pasaba de 500 a 1.600 millones de euros. La mejora permitirá viajar a Madrid en menos de tres horas. El presidente de la Xunta observó, a propósito de las dudas difundidas por el PSOE sobre la financiación del tramo, que para disponer de fondos europeos «el Estado tiene que solicitarlo». Esa petición sólo puede tramitarse una vez realizados los proyectos constructivos, ya que la UE necesita conocer el coste definitivo de la obra.