
Crónica | Caza mayor Una cuadrilla de Monforte abate una enorme bestia, de 195 kilos, que había matado a seis perros en los últimos años. Ellos dicen que es el ejemplar más grande cazado en Galicia
02 nov 2004 . Actualizado a las 06:00 h.«Pegueille, pegueille», dijo Alfredo Fernández a sus compañeros de batida después de ver como el enorme bicho se escondía entre la maleza. Tenía razón. A la mañana siguiente, dos de sus amigos volvieron para ver si encontraban algún rastro de sangre del jabalí y se toparon con su cadáver aún caliente. Tuvieron que recurrir a un remolque de gran tamaño para sacarlo del monte. Pesó 195 kilogramos. Colgado en vertical superaba los 185 centímetros de estatura de su cazador. Los integrantes de la peña de caza O Morín, de Monforte, le andaban detrás desde hacía años. «Era un asasino», dice José Manuel Fernández, el fundador de la peña y la persona que encontró el cuerpo. Este jabalí era un viejo conocido de los cazadores de Monforte y A Pobra do Brollón. En los dos cotos se habían tropezado con él en repetidas ocasiones. Su fiereza y su corpulencia le salvaron la vida muchas veces. Si lo acorralaban se revolvía contra todo lo que se moviese. Los cazadores le atribuyen la muerte de al menos media docena de perros de pandillas de Monforte y A Pobra de Brollón. El pasado día 23, los cazadores de la peña O Morín salieron a la zona de As Corveiras, en la parroquia monfortina de Salcedo, donde se lo habían encontrado otras veces. Iban a por él. «Alfredo tiroulle en canto o viu saír do mato», recordaba ayer José Manuel Fernández. Ya herido de muerte, el jabalí se dio la vuelta a la carrera y se perdió entre la maleza. Dados los antecedentes nadie se atrevió a ir tras él. Los cazadores de O Morín reivindican su trofeo. Ellos sostienen que nadie en Galicia había cazado un jabalí tan grande. José Manuel va más lejos: «Eu creo que é o récord de España».