Fallece José Gabeiras, jefe del Estado Mayor del Ejército durante el 23-F

La Voz LA VOZ | REDACCIÓN

GALICIA

El teniente general constitucionalista contribuyó a impedir que prosperara la intentona En permanente contacto con el rey Juan Carlos, fue clave en la desactivación del golpe.

02 ene 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

El teniente general retirado José Gabeiras Montero, que ocupaba el cargo de jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME) durante la intentona golpista del 23 de febrero de 1981, ha fallecido en Madrid a los 88 años, según fuentes de su entorno familiar. Desde su puesto de mando en el fatídico 23-F, Gabeiras, en sucesivos contactos con el rey Juan Carlos y los capitanes generales de las Regiones Militares, contribuyó a impedir que prosperara la sublevación contra el orden constitucional durante la incipiente democracia española. Este militar constitucionalista, íntimo amigo del entonces vicepresidente del Gobierno, Manuel Gutiérrez Mellado, demostró en las horas clave su alineamiento con los mandos partidarios de la subordinación del Ejército al poder civil. Los contactos que mantuvo con dos de los impulsores del golpe de Estado el mismo día de su ejecución -el general Alfonso Armada, su mano derecha como segundo jefe del Estado Mayor del Ejército, y el teniente general Jaime Milans del Bosch, jefe de la Región Militar de Valencia- supusieron una importante contribución para neutralizar la asonada. Gabeiras estaba en su despacho, con Armada, cuando conoció la entrada del teniente coronel Tejero Molina en el Congreso, aunque desconocía completamente su participación. Poco después, comunicó a Milans que quedaba relevado del mando y que se lo entregara al gobernador militar de Valencia. Llamó al Rey, y éste confirmó personalmente las órdenes de Gabeiras. Escasas horas después, Gabeiras supo que Armada había propagado que el Ejército estaba sublevado y que varias regiones militares se habían puesto del lado de Milans. Gabeiras y el Rey instaron al general a que fuese al Congreso «única y exclusivamente» para convencer a Tejero de que depusiese su actitud. A la mañana siguiente, el 24 de febrero, Gabeiras comunicó a Armada su destitución y el arresto domiciliario.