«Mar adentro» logra el óscar y es ya la película española más premiada

«¡España!». El Oscar a la mejor película extranjera para Mar adentro sonó en un perfecto castellano en la voz de la actriz Gwyneth Paltrow. Amenábar cumplió las quinielas y se alzó con el cuarto óscar para la historia del cine español siguiendo los pasos de otros cineastas como Almodóvar, Garci o Trueba. Su película se convierte así en la más premiada del cine español. Horas más tarde, el realizador madrileño confesaba en un hotel de Los Ángeles que tardó varios segundos en reaccionar ante el anuncio del premio. «Yo esperaba escuchar el nombre de la película alemana, o como mucho The sea inside ( título de su filme en inglés), así que cuando gritaron mi país me quedé en estado de shock sin comprender nada», dijo. Después de la noticia el director se subió al escenario visiblemente emocionado y dedicó su película a Ramón Sampedro. «Esta película esta basada en la historia de un hombre cuyo deseo de morir inspiraba mucha vida, para él va mi agradecimiento», fueron las primera palabras del realizador al recoger la estatuilla. Las gracias fueron también para el equipo técnico y artístico de la película y, como cabía esperar, para el actor principal, Javier Bardem. «Javier lo está celebrando en Madrid, creo que definitivamente me han roto el sofá de casa», bromeaba el director en una rueda de prensa regada de champán y felicitaciones. El director, que no logró borrar la sonrisa de su cara en ningún momento, aseguró que contaba cada uno de los escalones que llevaban hasta el escenario por miedo a tropezar y que la noche anterior no había dormido mortificado por los nervios. «Por eso ahora mi premio es quedarme calmado y relajado y poder marcharme mañana, tal y como había planeado, a un parque temático con mis padres», confesó. La victoria de la película no se vio empañada por la decepción de haber perdido el Oscar al mejor maquillaje. Manolo García, miembro del equipo de caracterización, confesaba que había llorado todo el día. Con el sabor amargo en los labios se quedó también el realizador Cántabro Nacho Vigalondo, quien no pudo alzarse con el oscar al mejor cortometraje. «No pasa nada esto como un pastel con guinda, pues yo me quedé sin la guinda pero tengo el pastel», decía Villalonga mientras paseaba por los pasillos del hotel. Victoria de «Million dollar baby» El duelo más esperado de la noche, la batalla entre Million Dollar Baby y El aviador se resolvió a favor de Clint Eastwood. Scorsese se tuvo que conformar con cinco óscares menores, entre los que se encontraban el de mejor actriz secundaria, para Cate Blanchett, mejor sonido o mejor vestuario. Clint Eastwood venció en el ring de la alfombra roja y se alzó con los cuatro premios más importantes de la noche: mejor película, mejor director, mejor actriz, para Hillary Swank, y mejor actor de reparto para el veterano Morgan Freeman. No hubo sorpresas y Jaime Foxx ganó el Oscar al mejor actor por Ray .

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