La Xunta estudia modificar la legislación para permitir este tipo de celebraciones festivas con mayor control Medio Rural también está dispuesto a flexibilizar el uso de cohetes
25 ago 2005 . Actualizado a las 07:00 h.La Consellería do Medio Rural aseguró ayer que si el globo de Betanzos o el de Celanova, por citar los más conocidos, tuviesen que elevarse hoy, no podrían lanzarse. En aplicación del decreto ministerial aprobado como medida de urgencia tras el fatal incendio de Guadalajara, queda prohibida esta actividad que, en los dos casos citados constituyen los actos centrales de las famosas celebraciones de San Roque, y foco de atracción turística para los miles de visitantes que cada 16 de agosto se acercan a ambas localidades siguiendo una tradición secular. La prohibición de lanzar cohetes o soltar artefactos que puedan provocar fuegos se refiere al período comprendido entre el 15 de julio y el 30 de septiembre. Sin embargo, fuentes de la Xunta indicaron ayer que la consellería ya estudia la redacción de una normativa para el próximo verano, que establecería las condiciones en las que sí se podrían llevar a cabo estas celebraciones, ajustándose al máximo a la normativa de prevención de incendios. «Hai a posibilidade de facer puntualizacións, e de cara ao ano que vén a Consellería tratará de sacar unhas regras», indicaron. Elevación sin mecha En todos los casos, el problema reside en la necesidad de reducir al máximo las actuaciones que disparen el riesgo de incendios. Respecto al globo de Betanzos, conocido como el aerostato de papel más grande del mundo y que lleva lanzándose desde hace 130 años, algunos vecinos apuntan la posibilidad de modificar el sistema de elevación para que no porte artefacto incendiario alguno. Se trataría, según indicaron, de eliminar la tradicional batería de fuegos artificiales que suele alojar la barquilla y retirar la mecha que alimenta su hinchado en el momento en que se encuentre en condiciones de elevarse y comience a surcar el cielo, a merced del viento, desde la torre de la iglesia de Santo Domingo. «Aínda non se tomou a resolución, pero xa se empeza a pensar en facer algo», apuntan en Medio Rural, para conciliar la tradición con la prudencia y aplacar los ánimos de los vecinos, que consideran impensable prescindir el próximo agosto de un acto que se ha convertido en toda una ceremonia y que cada 16 de agosto congrega a más de 50.000 visitantes. Entre tanto, la prohibición afecta a todos los aerostatos de papel que en la actualidad polarizan la atención festiva en múltiples lugares de Galicia, e incluso en ciudades como A Coruña, donde tampoco podría volar el globo de Os Castros, que los vecinos lanzan en las fiestas del Carmen. La aprobación de una nueva reglamentación autonómica que se ajuste a la normativa estatal deberá definir otro aspecto, si cabe aún más polémico, como es el lanzamiento de cohetes y fuegos de artificio, generalizada en cada pueblo gallego durante el verano. La orden ministerial se refiere también a los apicultores, que no podrán castrar sus colmenas en la temporada estival. «Tense comprobado que bastantes lumes orixínanse cando usan o lume coas abellas», indicaron en la consellería. Más controvertida parece la posible relación entre los aerostatos y los incendios, ya que los vecinos mantienen que aunque los globos suelen acabar en zonas de monte o campo, y en ocasiones sus restos son localizados por las brigadas, cuando caen al suelo ya están apagados.