En la política es de Suárez; hace un papel en la tercera parte de Torrente; y le encanta que le llamen ¡Fenómeno!
04 sep 2005 . Actualizado a las 07:00 h.La televisión lo catapultó a la fama, admira a Nino Bravo y a Tom Jones y no le importa que digan que fue el primer friki gallego si se dice con cariño. Cañita Brava es a Manolo González lo que Superman a Clark Kent. Santiago Segura ha vuelto a contar con él para la tercera parte de Torrente, que se estrenará a fin de mes. Antes de la entrevista negocia por teléfono una actuación en Asturias: «Con músico, son cuatrocientos euros; si voy solo, doscientos. Creo que os conviene el músico». -¿Cómo le trata la vida, Cañita? -Tengo actuaciones. Estuve en Ourense, en Visantoña... pero prefiero los sitios donde voy solo, cuando no soy el segundo plato. -Papelazo en Torrente... -Sí, se estrena el 30 de septiembre. ¡Tengo que llamar a Madrid mañana mismo! Me llevan de viaje, cojo el vión de ida y vuelta y voy con todo pago. Hago de camarero. También salí en Crónicas marcianas , con Sardá y con Boris. -¿Tiene frase y todo? -Tengo que decir «Seis mil pesetas de güisqui», como en la primera, sólo que esta vez son treinta y seis euros. Pero hay diferentes papeles que no puedo decir en el periódico porque nos lo prohibe Santiago Segura. -¿El cine es su sitio? -Sí. Me llamaron de Bilbao para hacer una película con el Fary y con Luixy Toledo, pero está pendiente de la subición. -¿De la qué? -¡De la subición! -¡Ah, de la subvención! Estoy tonto, perdone... ¿No le cansan los rodajes? -¡Estoy acostumbrado! Tengo peñas de fans en Coruña, en Vigo, en Andorra, que me vinieron con bolígrafos y relojes, en Lugo, en Valencia, en Madrid, en Bilbao... -¿Le gustaría ser el protagonista? -Sí que me gustaría. Ya sé que estudiar el guión es un rompecabezas, sobre todo si estás concentrado para componer las canciones de un disco nuevo. -Ya veo por dónde va. Pues aproveche para promocionar... -Lo quiero para finales de octubre. ¡Tengo que quitar las canciones en septiembre! Voy a componer una que se llama La chica de la plaza del rock, una creación nueva. Y estoy con otra que se llama Dale a la gaseosa Revoltosa, a ritmo de reggeton. -¿Me haría un adelanto? -(Canta y toca la percusión sobre la mesa) Retequén, retecón, retequén. Dale a la gaseo-saaaa, la Revoltoo-sa, retequén, retecón, retequén. Y estoy a ver si compongo Fiesta de verano. Hasta que monte esas tres o cuatro, no se podrá estrenar. -¿Cómo anda de amores? -Hay amigas que me quieren; hay otras que no. -¿Alguna especial? -De momento no, pero puede surgir. Hoy, a las mujeres les interesa el dinero. Antes era otra cosa, pero hoy no les importa que seas bueno, hoy miran el físico y miran a ver qué hay en la cartera. -¿Y la política? -Para mí, el único que tenía formalidad era Suárez, con él no me faltaba un duro. Fraga se dejó manipular por el Cuíña y por esos; y Touriño me dijo el representante que es buena persona. -¿La gente se ríe con usted o de usted? -Se ríen conmigo, les hago gracia. A la gente le encanta cuando canto el Twist, porque me rompo todo, porque tiene marcha (canta) Se pusieron a bailaar, los chicos y las chicas sin paraaar, es una sensación, en la ciudaad... ¡Chica enamorada del twist, oooohhhh, ¡twist twist! Esa chica, ¡twist, twist! El amooor. Y también les encanta O caldo de María (canta otra vez): O cal, o cal, o caldo de María sabe mal... Y cuando canto en chino (se lanza): Uanené, uanená, uanetá, uanetúúúúu. Entonces me dicen ¡Torero! ¡Bravo! El público se vuelve loco. Me llaman ¡Fenómeno! ¡Artista! ¡Maestro! ¡Eres un crack! Eso me gusta. -¿No se le han subido los humos como a otros? -No exijo nada. Si voy solo con mi música, sólo pido el hotel para dormir. Yo no soy de esos que saltan por cualquiera cosa, sólo me enfado con el teléfano móvil, que me da más lata que Dios.