Arde en Portonovo el yate confiscado hace seis años en la fallida operación Nirvana

Julio Á. Fariñas REDACCIÓN

GALICIA

21 ago 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

VARADO. El barco llevaba parado en el puerto portonovense desde el 2004, después de haber pasado cuatro años en el de Vigo. ?l Al Mohannad , un yate de pabellón británico interceptado en febrero del 2000 en la operación Nirvana, fue pasto de las llamas en la madrugada de ayer, tras llevar unos dos años varado en el puerto pesquero de Portonovo. Los bomberos de Sanxenxo fueron alertados a la una menos cuarto de la madrugada, pero casi dos horas más tarde seguía ardiendo, según informa Jaime Velázquez, corresponsal de La Voz en esta localidad. De momento se desconocen las causas del siniestro y no se descarta ni que haya sido intencionado ni fortuito, dado el tiempo que llevaba en estado de abandono. El Al Mohannad, equipado con dos po tentes motores intraborda trucados que podían desarrollar una velocidad de 40 nudos, fue valorado en su día en más de 300.000 euros. Su captura tuvo lugar en la madrugada del 21 de febrero del 2000 frente a las costas de Oporto y para ello fue necesario desplegar un aparatoso dispositivo aeromarítimo en el que participaron patrulleras y helicópteros de Aduanas y un comando de los Grupos Especiales Operativos (GEO) de la policía nacional, bajo los órdenes del juez Baltasar Garzón, ya que sospechaban que transportaba un importante alijo de cocaína. Como tripulantes habían sido detenidos Jesús Martínez González, Susito el Loro , de Cambados, Vidal Dadín, de Portonovo, y un ucraniano. A bordo no quedaba ni rastro de la droga, sólo un gran plástico que pudo servir para cubrir los fardos antes de descargar el alijo o de arrojarlo al agua. Como quiera que detrás de este abordaje había meses de investigación, en tierra habían sido detenidos Roberto Cordero Avión, hijo del capo Alfredo Cordero, de quien se sospechaba que era el cerebro de la operación, José Luis Viñas Morgade, Manzanita, y otras tres personas, una de ellas navarra, cuya identidad no había trascendido en su día. Tras tomar declaración a los detenidos que, obviamente, lo negaron todo al no aparecer el cuerpo del delito , el juez acabó archivando las actuaciones. La embarcación estuvo cuatro años en el puerto de Vigo y luego fue trasladada a Portonovo. Como patrón y titular figura un tal Pepe Marán que, al parecer, esperaba una indemnización por daños y perjuicios.