
La policía impidió que Vélez Garzón introdujera siete mil kilos de droga en el último año En la operación fue detenido un miembro de los Charlines y un empresario de Bueu
06 ene 2007 . Actualizado a las 06:00 h.Una estrecha colaboración entre la policía, el Servicio de Vigilancia Aduanera, los GEO y la Armada permitió detener hace unos días en Sevilla al principal distribuidor de cocaína en España en los últimos diez años, el colombiano Jorge Isaac Vélez Garzón, además de impedir que llegaran al mercado al menos 7.000 kilos de cocaína introducidos por la mayor red de narcotraficantes detectada en la península Ibérica en los últimos años y desmantelada en la llamada operación Destello. Vélez Garzón es el cabecilla de la operación desmantelada por la policía en los últimos días, que se saldó con la detención de 28 personas, 16 de ellas en Galicia. El colombiano tiene a sus espaldas un amplio historial, ya que fue detenido junto con Sito Miñanco en el año 1991 por un alijo de 2.000 kilos. Fue la primera vez que al cambadés se le condenó por un transporte de coca, y en el juicio, a Vélez Garzón le cayó una condena de 11 años y 105 millones de pesetas de multa. El fiscal recurrió la sentencia y en 1994 el Tribunal Supremo amplió la pena a 20 años. Posteriormente, tras el pertinente recurso, el Tribunal Constitucional la dejó en 15. Si en esta última operación fue detenida su compañera sentimental -Diana Patricia F.?C.-, en la anterior también fue condenada la que entonces era su pareja, Isabel Osorio Ramírez. Un Charlín en Sevilla Como mano derecha del colombiano se detuvo en Sevilla a José Benito Charlín Paz, un hijo del fallecido José Benito Charlín, y a un fiel colaborador de la familia, Camilo A. Cores. La lista de implicados se completa con el cambadés Ramón Canto Nine, los vilagarcianos José González Falcón y José Oubiña y un conocido empresario de Bueu, Alfonso Juncal Santos. Charlín Paz era el encargado de poner en marcha en Galicia la infraestructura necesaria para desembarcar los alijos de cocaína que llegaban desde Colombia. Sobrino del patriarca , en 1997 se vio implicado en un transporte de 6.000 kilos de coca. Por su parte, el dueño del pub Pilón, el isleño Ramón Canto Nine, se ocupaba de recoger los fardos en la costa, y Juncal Santos, propietario de una flota de barcos pesqueros, se encargaba, según fuentes de la investigación, de suministrar las embarcaciones de las que se servía la red para el transporte de la droga. Las pesquisas Los agentes llevaban tiempo detrás de la red que lideraba el colombiano, y en los últimos meses tuvieron constancia de los preparativos de dos importantes alijos con destino a España. En el primero, el pasado verano, no fue posible practicar detenciones porque los tripulantes de la embarcación que transportaba 4.000 kilos de cocaína la tiraron al mar. La segunda vez hicieron lo mismo cerca de Marruecos, pero fueron grabados por las cámaras del SVA y se pudo recuperar parte de la mercancía. Fue entonces cuando la Audiencia Nacional tomó la decisión de detener a los presuntos cabecillas y colaboradores de la red. En Galicia se ocupó del operativo el Greco -Grupo de Respuesta Especializada al Crimen Organizado-, la unidad policial creada el año pasado para desmantelar los clanes de las Rías Baixas, que trabajó en todo momento con la colaboración de los agentes de la Udyco -Unidad de Lucha contra el Crimen Organizado- en Galicia. En tres días se detuvo a siete personas en Sevilla, diez en la provincia de A Coruña, seis en Pontevedra, una en Madrid, tres en Cartagena y un último arrestado en Melilla. La mayoría de los detenidos declararon ayer en diferentes juzgados gallegos: en Vilagarcía, Cambados, Ribeira, Vigo y Padrón, aunque alguno no comparecerá hasta el próximo lunes, y lo hará en Tui. Se trata de un mero trámite, ya que al estar el dispositivo en manos de la Audiencia Nacional, todos ellos deberán ser trasladados a Madrid.