La Diputación de Lugo formalizó ayer la destitución del anterior presidente, Francisco Cacharro Pardo, y demás representantes de la institución en el patronato de la Fundación Centro Superior Cinexético e Piscícola de Galicia. En una junta de patronos convocada por el actual presidente, José Ramón Gómez Besteiro dio a conocer los nombres de los nuevos representantes y fue aprobada la realización de una auditoría que afectará a las áreas financiera y patrimonial. De este modo, la entidad lucense recobra el control de un ente al que había aportado unas propiedades valoradas en unos tres millones de euros.
Además de Cacharro Pardo, dejaron de ser patronos el ex vicepresidente primero de la Diputación, José Carlos Rodríguez Andina; el presidente y el secretario de la fundación, Javier Castroviejo Bolívar y Carlos Otero Muerza, y el secretario de la Diputación, Faustino Martínez. Este último volvió a ser nombrado secretario de la fundación, de acuerdo con los estatutos reconocidos por la Xunta.
Aparte del propio Gómez Besteiro y del secretario general, en sustitución de los anteriores fueron designados representantes de la Diputación el vicepresidente primero, Antón Bao, y los diputados Miguel Ángel Sotuela y Ricardo Parada.
A la asamblea convocada en Lugo no asistieron los representantes de la Consellería de Medio Ambiente, que ostenta el protectorado de la fundación. Sin embargo, el conselleiro delegó su voto en el presidente de la Diputación y los dos patronos que le corresponden se quedarán sin nombrar hasta que tome posesión el nuevo Gobierno en la Xunta. Para agilizar el proceso, el mandatario provincial anunció que solicitará una entrevista urgente con Feijoo.
Además de remitir al fiscal las medidas que apliquen con relación a la fundación cinegética, en la reunión de ayer fue adoptado el acuerdo de enviar escritos al Inem, a la Tesorería de la Seguridad Social, a la Agencia Tributaria y al Registro de la Propiedad para solicitar información y remitirles la que está en poder de los nuevos gestores, con el fin de que puedan actuar con todas las garantías legales, según señaló Gómez Besteiro. Anunció también que en fechas próximas acudirán a la parroquia monfortina de Tor, donde la fundación tiene su sede, para inspeccionar la finca y demás propiedades.