La oposición eleva su protesta con el boicot a dos comisiones a la vez

GALICIA

Pilar Rojo consigue una tregua de tres días para rebajar la tensión política en el Parlamento gallego

13 jun 2009 . Actualizado a las 02:40 h.

Los grupos del PSOE y del Bloque elevaron ayer un poco más el tono de su protesta contra la «mordaza parlamentaria» que en su opinión intenta colocarles el Gobierno de la Xunta y protagonizaron un nuevo plantón en el Pazo do Hórreo, esta vez actuando de forma simultánea en dos comisiones, la de Agricultura y la de Sanidade, que abandonaron profiriendo duros reproches al PP. La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, reunió por separado a los portavoces de cada partido con el ánimo de reconducir una situación que se crispa más por momentos, si bien poco más logró que una tregua de tres días para intentar alcanzar un acuerdo.

Tanto los socialistas como los nacionalistas coinciden a la hora de hacer el análisis de lo que ocurre en O Hórreo. En su opinión, el Partido Popular están llevando a cabo una «estratexia ben definida», según el portavoz del PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga, para «eliminar o Parlamento como un lugar onde se fai unha labor de crítica, control e impulso do Goberno».

La oposición acusa al grupo que sustenta al Ejecutivo de la Xunta de aplicarles una serie de cupos a la hora de introducir iniciativas para el debate en comisión o en pleno, cercenando así los derechos de los diputados.

De igual modo, se pronuncian en contra de la tentativa del PP de celebrar comisiones parlamentarias especializadas por temas, lo que llevaría, por ejemplo, a la comisión de Sanidade, Política Social e Emprego a celebrar sesiones monográficas dedicadas, en unos casos a las políticas sanitarias y, en otros, a las laborales.

Estas quejas volvieron a ponerse ayer sobre la mesa en el momento en que los diputados socialistas y nacionalistas abandonaron las comisiones. «As comisións temáticas non teñen sentido, porque estaríamos un mes e medio sen debatir sobre determinados temas», dijo a modo de protesta la diputada Laura Seara (PSOE), mientras el nacionalista Carlos Aymerich acusó al PP de convertir la Cámara autonómica «nun mero apéndice do Executivo».

Más leña al fuego

Tras los plantes en las comisiones, tanto el PSOE como el BNG convocaron a los periodistas para explicar su postura y echarle si cabe más leña al fuego. «Hai un intento de amordazar á oposición», se quejó la diputada Mar Barcón, mientras Aymerich abundaba en que en su grupo «non vai tolerar por máis tempo a imposición do PP».

Con la tensión flotando en el ambiente recibió Pilar Rojo a los portavoces de los tres grupos, por separado, dedicándoles casi media hora a cada uno. En la especie de terapia que se hizo en esos encuentros, los partidos encontraron espacios comunes para el diálogo, lo que llevó a todos al término de la reunión a mostrar su voluntad de alcanzar un acuerdo que clarifique las reglas del juego parlamentario.

De esta forma, Pilar Rojo consigue ganar tiempo para apagar el incendio político en la Cámara, si bien la tregua concluye el próximo martes en la junta de portavoces. Para entonces, tanto el PSOE como los nacionalistas aguardan que se ponga sobre la mesa una solución satisfactoria para todos.