Con una mezcla de humor y asombro asisten los diputados del Partido Popular a la bronca parlamentaria montada por los grupos de la oposición, con el abandono reiterado de las comisiones y plenos. La viceportavoz del PP, Marta Rodríguez Arias, acusó al PSOE y al Bloque de dejarse llevar por una actitud con la que demuestra hacer una clara «deixación de funcións», al tiempo que ofreció diálogo para reconducir la situación.
Rodríguez Arias estaba presente ayer en la comisión de Sanidade cuando la oposición montó la algarabía y tomó el camino de la puerta al poco de que se iniciase. Después de quedarse sola en la sala con su grupo, la diputada arousana acusó tanto al PSOE como al Bloque de cometer una «falta de respecto» al Parlamento con una decisión que, a su juicio, no se sostenía en una jornada como la de ayer.
Un gesto de «pantomima»
De hecho, tanto Rodríguez Arias como el presidente de la comisión, Miguel Santalices, repararon en que el orden del día recogía seis asuntos, todos promovidos por diputados socialistas y nacionalistas. «Non entendemos esta pantomima, a non ser que sexa por facer oposición de barricada», esgrimió Arias.
Tanto el PP como los demás grupos modularon mucho su postura a medida que avanzaba la mañana y fueron entrando, como si de un confesionario se tratara, a ver a la presidenta de la Cámara. Pilar Rojo eludió hacer declaraciones al término de la reunión, aunque difundió una nota en la que apela a la «responsabilidade» de los partidos para «rebaixar a tensión» en el Parlamento. Rojo también se comprometió a actuar con «ecuanimidade» y de acuerdo con el reglamento, a la vez que hizo un llamamiento para mantener «o decoro, educación e o respecto polos demais durante as sesións».
De puertas adentro, no obstante, tanto Pilar Rojo como los portavoces se habrían corresponsabilizado de los errores cometidos, haciendo votos para corregirlos en el futuro. De la misma manera, todos los grupos se mostraron conformes en darle un margen de confianza a la jefa del legislativo para que haga una propuesta que pueda conciliar todas las posturas.
«Deberíamos chegar a setembro con todo ordenado», declaró el nacionalista Carlos Aymerich tras la reunión, mientras el socialista Fernández Leiceaga se expresó en términos similares al ratificar la «vontade común de todos» para el buen desarrollo de las comisiones y los plenos. «Espero que esto teña visos de solución», abundó Leiceaga, antes de apuntar que el próximo martes, en la junta de portavoces, habrá oportunidad de corroborarlo.