La oposición dice que nadie planteó mecanismos para evitar su posición de ventaja
08 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.El PP gallego se quedará provisionalmente sin su mayoría absoluta en el Parlamento a causa de la baja de la presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, que fue sometida a una intervención quirúrgica de la que se recuperará durante «as próximas semanas» en su domicilio. La ausencia de Rojo deja al PP con 37 escaños, los mismos que suman PSOE y BNG, y pone a prueba la capacidad del Gobierno de Feijoo para mantener el mando en O Hórreo y no perder ninguna votación.
Por lo de pronto, los populares ya informaron a los grupos de la oposición del daño colateral que causará en sus filas la ausencia de Rojo, ausencia que atribuyen a una «causa de forza maior», y demandan altura de miras y respeto institucional en las bancadas de la izquierda del hemiciclo para que se abstengan de utilizar en su beneficio la ventaja provocada por una enfermedad.
En la oposición se dieron por enterados de la situación, pero apuntan que el PPdeG no puso sobre la mesa ninguna fórmula o mecanismo para poder sortear las dificultades que se plantearán en la sesión plenaria que arranca hoy. De todas formas, el 37 a 37 también dejaría a la oposición sin mayoría suficiente para aprobar algunas de las proposiciones incluidas en el orden del día, como la que firma Guillermo Meijón para pedir que se restablezca el programa de gratuidad de los libros de texto que modificó el PP.
La de hoy no es la primera vez que los populares se quedan sin mayoría absoluta en la Cámara. El grupo que sustenta al Gobierno ya pasó por ese trance en uno de los plenos anteriores a las vacaciones de verano, cuando Feijoo fue convocado por el ministro de Fomento, José Blanco, para revisar el calendario del AVE. En aquel momento, todos los grupos convinieron que se trataba de una «ausencia de carácter institucional» y de la ronda de votaciones se ausentó el nacionalista Fernando Blanco para que el PP conservara intacta su mayoría.
La baja de Rojo obligará al vicepresidente de la Cámara, José Manuel Baltar, a conducir todo el pleno, aunque en momentos puntuales puede ser moderado por el vicepresidente segundo, el socialista Ricardo Varela.