Ha reivindicado hoy, en una declaración institucional, la «honorabilidad» y el «buen hacer» de sus diputados.
16 feb 2010 . Actualizado a las 21:38 h.El Parlamento de Galicia ha reivindicado hoy, en una declaración institucional, la «honorabilidad» y el «buen hacer» de sus diputados, y asegura que «no cuestiona» los datos que aportan los parlamentarios.
La declaración de la Cámara se produce después de la rueda de prensa celebrada hoy al término de la Junta de Portavoces, y en la que los diputados Pedro Puy, del PPdeG; Xoaquín Fernández Lecieaga, del PSdeG, y Carlos Aymerich, del BNG, reconociesen estar dispuestos a analizar el sistema de dietas de los diputados y, en concreto, lo que la Cámara les abona en concepto de desplazamientos.
El pronunciamiento de los tres parlamentarios se produjo a preguntas de los periodistas y después de que el portavoz del PPdeG, Antonio Rodríguez Miranda, reconociese haber realizado viajes en el coche oficial del vicepresidente del Parlamento, José Manuel Baltar, para participar en plenos y reuniones parlamentarias y haber cobrado dietas por traslado.
En el escrito, la Cámara legislativa gallega precisa que «cualquier hecho irregular que pueda haber sucedido se investigará, pero no por ello debe ser visto como un comportamiento generalizado».
«Cualquier intento de generalización resulta injusto, por no ajustarse a la realidad y proyectar una imagen distorsionada de la labor parlamentaria», se dice en la declaración.
En este sentido, se añade que el Parlamento «no tiene por qué dudar de los datos personales facilitados por los diputados al inicio de cada legislatura y que sirven como base para el pago de las indemnizaciones a las que cada uno de ellos tenga derecho», y aclara que, «sin perjuicio de esto, la Cámara reitera su disposición para analizar y corregir cualquier anomalía que pueda detectarse».
En la declaración institucional se hace referencia al compromiso con la austeridad de la actual Legislatura, y recuerda que la primera medida adoptada por la actual Mesa del Parlamento, en materia de retribuciones, consistió en reducir en un 3% los salarios de los diputados para el año 2010.
Además, se recuerda que el presupuesto del Parlamento gallego para 2010 se redujo en un 5,29%, al pasar de 19.557.200 euros de 2009 a 18.523.560 euros programados para 2010, lo que supone un recorte de 1.033.640 euros en términos absolutos.
En el marco de esta política de contención del gasto, la Cámara recuerda en su comunicado que una de las primeras medidas impulsadas por la presidenta, Pilar Rojo, consistió en la implantación de un plan de austeridad que permitió reducir los gastos del Parlamento 1,7 millones de euros en el último cuatrimestre de 2009.