La Ley de Dependencia dispara las quejas relacionadas con los servicios sociales

EFE

GALICIA

El Valedor do Pobo ha entrgado el informe del 2009 a la presidenta del Parlamento, con lo que se inicia su tramitación en la Cámara.

15 mar 2010 . Actualizado a las 21:34 h.

Las quejas relacionadas con el área de los Servicios Sociales se triplicaron durante el año 2009 debido a los problemas derivados con la Ley de Dependencia. Así se desprende del informe del Valedor do Pobo del citado ejercicio, que esta tarde fue presentado en rueda de prensa por Benigno López, titular de la institución.

López entregó por la mañana el informe a la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, con lo que se inicia su tramitación en la Cámara, que culminará con la comparecencia del Valedor ante el pleno. La presidenta valoró el rigor del informe y enmarcó la labor del Valedor en el sistema de garantías que ampara a los ciudadanos, por lo que animó a la sociedad en su conjunto a conocer sus competencias y funcionamiento, pues se trata de una institución a la que cualquier persona puede y debe acudir cuando considere que cualquier administración vulnera alguno de sus derechos, informó el Parlamento en un comunicado.

Durante el año 2009, el alto comisionado parlamentario tramitó un total de 2.634 quejas, 76 más que en el ejercicio anterior pese a que en los primeros meses del año «la sociedad gallega pareció mantenerse a la expectativa, al haberse registrado un descenso en el ritmo de presentación de iniciativas», indicó el Valedor en su comparecencia de prensa.

Entre las áreas que destacan por haber recibido un mayor número de quejas figura la de Servicios Sociales, con 361 (13,71% del total), el triple que en el ejercicio de 2008.

La Ley de Dependencia contabilizó 300 quejas de las 361 del área de Servicios Sociales. En relación con este asunto, Benigno López indicó que «en la mayoría de los casos se comprobó que los argumentos esgrimidos por los ciudadanos eran fundados».

Además, insistió en que persisten los atrasos en la valoración y aprobación de prestaciones a través del programa individual de atención, y dijo que existen casos en los que la resolución final llegó a exceder del año y medio desde la solicitud.

El Valedor subrayó que el año 2009 «abrió una puerta a la esperanza» al lograrse que la Xunta accediese a abordar los atrasos de las prestaciones económicas a los dependientes fallecidos durante la tramitación de las ayudas.

Al área de Servicios Sociales le siguen, en número de quejas recibidas, las de Empleo Público e Interior, con 336 quejas; Obras Públicas y Expropiaciones, 262;, Urbanismo y Vivienda, 241; y Educación, 219.

Por detrás de estas áreas se situaron otras materias tradicionalmente alcistas, como Industria, Comercio y Turismo o Administración Económica y Transportes, donde las reclamaciones se redujeron a la mitad.

Benigno López destacó como notables los descensos en materias como Sanidad o Cultura y Política Lingüística, con medio centenar de quejas menos, o Justicia, con una bajada de treinta reclamaciones.

Respecto a la Administración autonómica, en 1.489 ocasiones la institución tuvo que dirigirse a algún departamento de la Xunta. En concreto, 1.011 quejas implicaron a algún departamento administrativo, seguida en número por las que incluían como responsables a los ayuntamientos (463), las diputaciones y las universidades.

Entre las dirigidas a la Xunta, el mayor número de quejas se refieren a la Consellería de Trabajo y Bienestar, que absorbió las competencias que en el anterior Gobierno correspondían a la Vicepresidencia de la Igualdad y a la Consellería de Trabajo, con 349; a la de Sanidad, con 193, y a la de Educación y Ordenación Universitaria, con 187; los tres únicos departamentos que superan el centenar de reclamaciones.

Otros aspectos que destacan del informe del Valedor do Pobo del año 2009 es que la mayor parte de las quejas presentadas por los ciudadanos parten de iniciativas individuales, no colectivas; el mayor número de quejas presentadas por los hombres frente a las mujeres, o que el mayor número de reclamaciones proceden del medio urbano, y sólo en 195 casos el afectado reside fuera de Galicia.

El Valedor destacó el caso del municipio de Betanzos, que, con 169 quejas, supera en número de quejas a ciudades como Ferrol, Lugo, Ourense o Pontevedra, dado el elevado número de reclamaciones en contra del trazado del tren de alta velocidad.

Benigno López se refirió también a que en el año 2009 la institución no formuló ninguna declaración de hostilidad y entorpecimiento. Pese a ello, López destacó los supuestos más flagrantes de «falta de colaboración» para con la institución, y citó los Ayuntamientos de Boiro, Tui y Oroso «por su contumaz actitud respecto de las quejas relacionadas con ruidos derivados del ocio nocturno».

Aludió asimismo los frecuentes atrasos en el envío de la información solicitada por otro grupo de Ayuntamientos, como los de Vigo, Ribeira, Xino y Ponteareas, a los que la institución advirtió declaración de hostilidad en tres o más ocasiones.