Dos de las víctimas, madre e hija, viajaban en un BMW que invadió el carril contrario
09 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.A los tres muertos en las carreteras del fin de semana en la provincia de Pontevedra se sumaron ayer otras tres víctimas mortales en un brutal accidente de tráfico ocurrido en Vilagarcía. El siniestro ocurrió cerca de las once de la mañana en la VG-4.3, en el kilómetro 7. Se trata de una carretera inaugurada el pasado verano que sirve de enlace entre el puerto de Vilagarcía y la vía de O Salnés con la AP-9, y que a la vez hace de circunvalación sur de la ciudad. El vial no había sido todavía escenario de ningún accidente mortal, hasta que ayer dos mujeres de Vilanova que circulaban en un BMW 320 chocaron contra dos vecinas de A Illa que iban en un Nissan Patrol.
Las ocupantes del primer coche murieron en el acto; la acompañante del segundo, algunos minutos más tarde en una ambulancia medicalizada en la que los médicos trataron, inútilmente, de reanimarla. La conductora del todoterreno se recupera de las graves heridas en la uci de Montecelo.
El BMW, de color gris, iba en dirección a Vilanova. Lo conducía Sandra Paz Torrado, una joven de 22 años que iba con su madre. En el kilómetro 7 perdió el control del vehículo e invadió el carril contrario. De frente llegaba otro coche, un Nissan Patrol en el que viajaban dos hermanas de A Illa. El choque fue muy violento. El turismo quedó destrozado en la carretera, con sus ocupantes dentro, ya muertas.
Los bomberos centraron sus esfuerzos entonces en la excarcelación de las otras víctimas. El helicóptero del 112 esperaba para emprender vuelo, pero era tal la gravedad de una de ellas, que los médicos optaron por tratar de reanimarla allí mismo en una ambulancia medicalizada. No fue posible. Minutos después, fallecía también. Más suerte tuvo su hermana, ingresada en estado grave.
Las fallecidas son María del Carmen Torrado Martínez, de 57 años, y su hija Sandra Paz Torrado, de 22, que viajaban en el turismo. Son vecinas de Cruceiro de San Roque, en Corón (Vilanova). También murió María José Pouso Cores, de 57 años, de A Illa. Su hermana Teresa, que conducía el todoterreno, es la única que salvó la vida.
En una primera hipótesis, el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Delfín Fernández, apuntó que el BMW se salió de la curva «por exceso de velocidad» antes de ir a estrellarse contra el todoterreno.