El exbanquero se pregunta en V Televisión por qué el Gobierno tomó esa decisión con el vicepresidente del Banco Santander
29 nov 2011 . Actualizado a las 10:53 h.Nació en Tui, tiene vivienda en A Mezquita (Ourense) y es gallego «de sangre». Rechazó tópicos, pero formuló una definición que encabezó así: «El gallego es un hombre pegado a la tierra». Incluso abordó la morriña: «No se siente cuando te vas, sino cuando te obligan a irte». Mario Conde, exbanquero, expresidente de Banesto y condenado a prisión -«me propuse resistir», dijo sobre su paso por ella-, repasó numerosos temas durante su entrevista en V Televisión, muchos de ellos relacionados con su libro De aquí se sale. Afirmó que las víctimas de lo que pasa en España «somos todos» y que los síntomas de lo que venía no se detectaron porque funcionó la propaganda política. Reconoció que el pasado 20-N no votó y que, si se entiende como deseo de participar en política el derecho a decirle a los políticos que lo están haciendo mal, entonces sí los tiene. «De momento, lo que he oído de Rajoy es nada», espetó, añadiendo que «es inevitable que la sociedad civil reaccione» y que el movimiento 15-M «no ha terminado».
Sobre el indulto de Alfredo Sáenz, vicepresidente y consejero delegado del Banco Santander, Conde considera que, no siendo una medida ordinaria ni urgente, habría que preguntarse la razón de la decisión del Gobierno. De Sáenz dijo que es «la persona que probablemente mejor conoce todo el engaño que se hizo en el 93 en el caso Banesto y ese conocimiento, políticamente, vale mucho. Como ciudadano no me esperaba que a un gobierno de izquierdas en funciones se le ocurriera violentar la voluntad del Supremo, pero como Mario Conde me sentí bien, porque si había alguien que no entendiera qué había pasado, con esta decisión ya no queda ningún dormido, solo mercenarios».