En el anterior mandato se registraron doce mociones de censura en Galicia. En este, Cee inaugura la cuenta. Otros concellos gallegos sufren tensiones.
Muros
En Muros (9.565 habitantes) se planteó la posibilidad de una moción de censura. En este Concello gobierna el PSOE en minoría (6 concejales frente a 4 del PP y 3 del BNG). Fue la portavoz nacionalista, María Xosé Alfonso, la que se manifestó públicamente a favor de desalojar a la regidora, Caridad González, «polo seu cúmulo de despropósitos». En el Bloque llevaron a votación esta opción y hubo división de opiniones. El gran escollo para los nacionalistas es servir en bandeja la alcaldía al PP. El anterior mandato ya fue convulso en Muros, puesto el candidato del BNG llegó a la alcaldía gracias a los populares.
Vilamartín de Valdeorras
En este municipio ourensano de 2.047 vecinos el Ayuntamiento está en manos del PSOE, que tiene 4 ediles, los mismos que el PP y solo uno más que los independientes de A.P.Ga. Hubo negociaciones entre estas dos últimas formaciones, pero no llegaron a un acuerdo porque los cabeza de lista de ambos partidos, la popular María Jesús Candal (anterior regidora que desalojó a su padre del poder) y Jesús Quintas ambicionan el bastón de mando.
Moaña
El mandato ya comenzó con una sorpresa en este Concello pontevedrés de 19.336 habitantes. A pesar de que el PSOE y el BNG, que ya habían gobernado juntos, sumaban la mayoría, tomó posesión como alcalde el popular José Fervenza gracias al voto en blanco de un concejal socialista. Después hubo un acercamiento entre las formaciones de izquierda hasta el punto de que después del verano se daba por hecha la moción de censura. Pero la dimisión del líder del PSOE aplazó la maniobra, que sigue estando latente en la política moañesa.
Vimianzo
La amenaza de la moción de censura se cierne también sobre Vimianzo. El BNG gobierna en solitario con 4 ediles. El PP tiene 3, los mismos que los independientes y el PSOE. La oposición llegó a plantearse un pacto de conjunto para dar la alcaldía al segundo de la lista socialista, pero bajo amenaza de expulsión del PSOE. No hubo acuerdo.
Foz
El fantasma de la moción de censura planeó sobre Foz (Lugo, 9.968 habitantes) tras cumplirse los primeros cien del gobierno del PP. En octubre, Unifoz pidió el apoyo del PSOE para desalojar a Javier Jorge Castiñeira. Pero el intento no fructificó.
Viveiro
Los 8.039 vecinos de Viveiro también fueron testigos de turbulencias en sus municipios. En diciembre hubo un amago de ruptura en el bipartito del PSOE y el BNG.
Vigo
Es evidente la tensión entre el PSOE, en cuyas manos está la alcaldía, y el BNG. Pero la moción de censura no es una opción. El nacionalista Santiago Domínguez ha asegurado en más de una ocasión que no permitirá que los 297.241 vigueses sean gobernados por la derecha.