El BNG acusa a José Blanco de abrir con pompa un sucedáneo de AVE
31 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Finalizado el duelo por las víctimas de la tragedia ferroviaria, la clase política ha abierto la veda. Y el límite para haber roto el silencio impuesto parece haberlo marcado el funeral del lunes en la catedral compostelana. Una cita a la que no asistió el Bloque, al entender que era necesario un acto civil previo en un lugar con capacidad para acoger a muchos más ciudadanos. Fue precisamente el frente nacionalista, por boca de su portavoces nacional y parlamentario, Xavier Vence y Francisco Jorquera, el que inició el fuego contra el exministro de Fomento, José Blanco, al que acusó de abrir «pomposamente» en Galicia durante el 2011 un sucedáneo de alta velocidad sin los sistemas de seguridad adecuados. Unas inversiones, según el BNG, que contaron con el aplauso entusiasta del Gobierno del PP en la Xunta.
También AGE, a través de su diputado Antón Sánchez, incidió en el tema de la seguridad. El parlamentario cree si la red gallega contase con las medidas directas e indirectas asociadas a la alta velocidad «o terrible accidente de Angrois non ocorrería». Preguntado ayer por estas graves acusaciones, el ex ministro de Fomento, declinó entrar en ningún tipo de valoración.
Mientras el Bloque y AGE denunciaban una campaña para convertir al maquinista en chivo expiatorio y ocultar así posibles problemas del sistema ferroviaro, los partidos de ámbito estatal también abrían la veda. El PSOE registró ayer una petición en el Congreso para que la ministra de Fomento, Ana Pastor, y los responsables de Renfe, Julio Gómez-Pomar, y del ADIF, Gonzalo Ferre, ofrezcan explicaciones del accidente ferroviario. El PSOE quiere «analizar detenidamente» la información «que venga del Gobierno» para evitar que se repitan tragedias como la de Santiago, precisó en Vigo Gaspar Zarrías, quien cree que el accidente en la curva de A Grandeira marca un antes y un después desde el punto de vista de la seguridad ferroviaria. Los socialistas llamaban ayer a dar explicaciones en el Congreso a los responsables del Gobierno y a los gestores ferroviarios sin saber que la propia titular de Fomento, Ana Pastor, y los responsables de Renfe y el ADIF ya habían solicitado comparecer para informar sobre la tragedia. Lo harán en la Comisión de Fomento del Congreso, en sesión extraordinaria.
La presencia de Pastor en el Parlamento está sin fecha, pero el PP justifica los plazos en que la máxima responsable de las infraestructuras debe comparecer con toda la información posible sobre la mesa. Y recuerda que todavía ayer se estaban abriendo las cajas negras.