Caso Asunta: La coartada de Basterra se ve comprometida porque lo vieron con la niña en la calle
GALICIA
«Sin ningún género de duda». Así de contundentes se mostraron ayer los dos nuevos testigos que declararon por el caso Asunta y que coincidieron en señalar que la tarde del 21 de septiembre, a las 18.18 horas, vieron a Asunta con su padre, Alfonso Basterra, en la confluencia de las calles República Arxentina y Xeneral Pardiñas.
La importancia de este nuevo testimonio radica en que es la primera vez que los investigadores cuentan con algo que pueda situar a Basterra fuera de su piso, situado en la calle República Arxentina, de Santiago, la tarde del día en el que murió Asunta. El padre de la niña ha asegurado que tras la comida en su casa con la pequeña y su exmujer, Rosario Porto, él se quedó fregando los platos y que después se enfrascó en la lectura de un libro.
Sin embargo, estos testigos indicarían que Basterra mintió sobre dónde estaba y pondrían en duda su coartada al situarlo en la calle a la hora en la que Rosario Porto fue a buscar su coche para ir junto a Asunta a su casa de Teo. Los investigadores creen que él pudo también subir a ese vehículo, lo que además le situaría en la escena del crimen, que es esa casa.
Los testigos son una joven menor de edad y un amigo suyo, que estaban haciendo unas compras en una tienda. Ella reconoció perfectamente a Asunta porque habían sido compañeras de clase, aunque ha especificado que ese día no se detuvo a hablar con ella.
El abogado del hombre cuyo perfil genético coincide con la mancha de semen hallada en la camiseta de Asunta -y que los investigadores creen que es una contaminación-, Alberto Martín, ha asegurado que los dos jóvenes «han especificado con absoluta claridad que vieron esa tarde a Alfonso Basterra y a Asunta». Además, también declaró ayer la madre de la excompañera de clase de la pequeña, ya que la testigo, que iba con ella a clases de francés en la Alianza Francesa, le relató que la había visto.
El hombre que vio una asiática
También ha prestado ayer declaración como testigo un hombre que dijo haber visto a una niña de rasgos asiáticos que podía ser Asunta a las 19 horas del 21 de septiembre en una calle del Ensanche de Santiago. Finalmente, llegó a la conclusión de que no era la misma niña, lo que ayer ratificó ante el juez Taín.