
Los fondos que genera solo aportan el 21% de lo que gasta
20 jun 2015 . Actualizado a las 14:54 h.El sistema universitario tiene sobre sí la sombra de un giro drástico en su modelo de financiación que les obligará a perseguir más rendimiento económico a su producción investigadora y una mayor interrelación con el sector empresarial como alternativas económicas y fórmulas de atracción a un menguante alumnado.
Aunque hay coincidencia entre los rectores gallegos a la hora de demandar un mayor apoyo económico de la administración, los de Santiago y Vigo admiten que esa financiación se ligue cada vez más a resultados y objetivos, es decir a la calidad educativa, y el reparto dependa menos del número de alumnos. La UDC, inmersa en una crisis económica que le ha llevado a paralizar sus gastos corrientes, reclama en cambio elevar los ingresos públicos para cubrir sus necesidades y luego negociar otras partidas en función de resultados.
Su posición está influida por ser de las tres universidades gallegas la que menos fondos genera por su propia actividad. Según el último presupuesto liquidado, el grado de dependencia de los fondos que les aporta la Xunta y el Estado llega en la Universidad de A Coruña al 78,1 % de sus cuentas, porcentaje que no ha hecho más que elevarse en los ejercicios cerrados del 2011 al 2013. En Vigo el baremo de autonomía económica se ha incrementado en su último presupuesto hasta cubrir uno de cada cuatro euros que gasta, y Santiago asume uno de cada tres euros que necesita.
En esos tres ejercicios las universidades gallegas han ingresado a través de la Xunta 1.109 millones de los 1.546 que gastaron.
Con las tasas de matriculación congeladas y el censo de alumnos estancado, salvo en A Coruña que desde el 2009 sigue descendiendo, la captación de fondos externos vía patentes, convenios y programas de investigación se antoja vital. En ese capítulo la UDC vuelve a situarse a la cola, con el 18 % de los fondos captados por el sistema universitario gallego: 15 millones en el 2013 y ha bajado a 11,9 en el 2014, mientras que Vigo ha conseguido casi triplicar esa cifra con 31,6 millones y el 36 % de la financiación externa lograda en Galicia, mientras en Santiago, aunque baja cuatro millones y se sitúa en 41, se hace con el 46 % del total.
La Fundación Conocimiento y Desarrollo, que monitoriza el sistema universitario español, integra a la universidad coruñesa en función de los fondos privados captados dentro del grupo de «rendimiento reducido», mientras que a Vigo la sube al de «alto rendimiento», al igual que por sus patentes, producción que a la UDC le sitúa en el grupo intermedio de toda España.