
A otras dos les darán audiencia para que justifiquen las bajas temerarias que plantearon
06 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La mesa de contratación del concurso para adjudicar los 20 comedores cuyo contrato fue rescindido por deficiencias en la comida ha decidido excluir a cuatro de las nueve empresas que se presentaron al concurso. Lo hace porque incumplen las frecuencias mínimas de alimentos en los menús que han presentado. Tres de ellas optaban solo a gestionar los comedores escolares de A Mariña. Se trata de las firmas Twity, que incumple las frecuencias de productos lácteos y legumbres; Gescor, que no ofrece suficientes menús con legumbres y frutas, y Alprinsa, que no cumple con los estándares exigidos de presencia de productos de mar y de carne. La última empresa excluida es Freire Chico, que se presentó para gestionar los 20 comedores que se quedaron sin contrato. En este caso, incumple la frecuencia mínima de productos del mar.
Además, la mesa de contratación ha apreciado bajas temerarias en dos ofertas. En el lote número 3 (correspondiente a los centros de la zona de A Mariña lucense) la empresa Eurest Colectividades ha presentado un precio unitario por menú de 3,70 euros, lo que se considera baja anormal o desproporcionada. En el lote número cuatro, en el que se incluyen los colegios de la zona de Arousa, la empresa señalada con una baja temeraria es la unión temporal de empresas entre José Fajardo y Antonio Gallego Cid, que ofrece un precio unitario de 3,09 euros por menú.
En cumplimiento de la ley, la mesa acordó dar audiencia a las dos firmas señaladas.
En los otros dos lotes no afectados por las bajas anormales, la mejor posicionada es Serunión, que obtiene la mayor puntuación en ambos casos. Además de ofrecer el precio más bajo, incluye las mejoras de menor uso de frituras y empanados en la elaboración de los menús y el uso de productos lácteos de origen gallego.
Cambio en los criterios
A raíz de la rescisión del contrato con las empresas que tenían la concesión por deficiencias en la comida que se servía -que se preparaba en Málaga y luego se trasladaba a Galicia- el nuevo pliego de condiciones aprobado por la Xunta incluye la obligatoriedad de que las empresas concesionarias tengan cocinas a menos de 200 kilómetros de los comedores y puntuación extra por el uso de productos gallegos y de menos fritos.