Los mejores expedientes de Galicia se reparten por veintidós carreras

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

Los alumnos más brillantes no solo van a Medicina y a dobles grados

26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Pero con esa nota por qué no haces Medicina? Un alumno o alumna que tiene un 13 (sobre 14) escucha esta pregunta con alguna frecuencia por parte de amigos o familiares. Hay una creencia de que los mejores expedientes se van a Medicina y aunque sin duda es la carrera que concentra el mayor número de notas espectaculares, no hay motivo para que ensombrezca a otras titulaciones que también son deseadas por muchos alumnos brillantes.

¿Cómo saber qué carreras tienen los mejores expedientes? No se puede medir la nota de corte, porque no es lo mismo un grado con 240 plazas que una simultaneidad (dos grados distintos a la vez) con solo diez 10 pupitres. Entonces, lo mejor es igualar las posibilidades y comprobar cuál es la décima mejor nota que se apuntó a cada una de las carreras.

Y ahí aparecen las sorpresas. Los jóvenes con mejores boletines no se concentran en una o dos carreras, sino que se extienden por 22 titulaciones de las más de 160 que hay en el sistema gallego. Lo mínimo que han tenido estos jóvenes es un 8 en la fase general (sobre diez), aunque la mayoría seguramente rondará el 9, igual que en su expediente de bachillerato. Y en todos los casos se puede decir que el top ten de los alumnos han elegido esa carrera porque han querido, ya que sus medias les permitirían entrar donde quisiesen, incluso en otras partes de España (con beca asegurada). De las tres universidades gallegas, es Santiago la que tiene más prestigio (también es la única sede de muchas de las titulaciones con más demanda).

Las carreras con más tirón son de ciencias de la salud, científicas y del ámbito de la comunicación, seguidas de las titulaciones económicas, jurídicas y tecnológicas. Hay un detalle destacable, y es que al margen de los dobles grados, «los alumnos, y sobre todo los padres, continúan prefiriendo las carreras con nombre de carrera», como recalca Pedro Armas, vicepresidente de la CIUG.

Dobles grados con tirón

Del grupo de las carreras más deseadas hay siete dobles grados: Matemáticas-Física, Comunicación Audiovisual-Xornalismo, Enxeñería Informática-Matemáticas y Química-Bioloxía, todos en Santiago y las tres primeras con solo diez plazas cada una, mientras que la última ofrece 20 plazas; dos opciones en Vigo, Traducción-Interpretación Español-Inglés (50 plazas) y ADE-Dereito (40); en A Coruña está ADE-Dereito, con 60 plazas. El éxito del binomio ADE-Dereito lo explica Santiago Gómez, decano de Económicas de Vigo y por tanto responsable del doble grado: «É moi valorado polo mercado porque aínda que ADE é unha titulación moi disciplinar (porque ten economía, xestión, dereito e socioloxía), a combinación con Dereito fai moi atractivo ó licenciado, xa que en calquera empresa o marco xurídico é fundamental».

Al margen de los dobles grados, el resto es un recorrido por las carreras más clásicas: Medicina, Física, Matemáticas, ingenierías (Aeroespacial, Informática, Química o de Telecomunicacións), Farmacia, Xornalismo, Enfermería, Bioloxía, Dereito, Odontoloxía y Veterinaria.

Existen cosas curiosas. Física pasó en cinco años de una nota de corte de poco más de 5 al actual 11,2, aupado por su prestigio, las salidas profesionales y el interés hacia el doble grado con Matemáticas; esto explica en parte que la décima mejor nota de la carrera sea nada menos que un 13,260. Enxeñería Informática, por su parte, se repite tres veces en este selecto grupo: con la simultaneidad con Matemáticas, y en los campus de Santiago y A Coruña. En Compostela la décima nota ha sido un 12,552 y en Elviña, un 12,280; Santiago cerró con 10,8 y Coruña con 8,3, claro que en Santiago hay 60 plazas y en A Coruña, 240.

Luis Hervella, decano de Enxeñería Informática de A Coruña, recuerda que las muchas plazas que ofrecen son incluso pocas para la demanda actual: «No es que apenas tengamos paro, es que hay déficit de titulados. No llegan los que salen cada año. Existen cada vez más sectores en los que encaja nuestro perfil, desde las aplicaciones para móviles a la ciberseguridad, la programación web, la informática aplicada a la salud y por supuesto el Big Data».

Lo que sí detecta Hervella es que las mujeres siguen siendo remisas a hacer Informática desde que es ingeniería: «Estamos intentando revertir la situación, pero este año, como en los anteriores, el 90 % de las matrículas son de chicos. Antes de ser ingeniería, cuando era licenciatura, eran solo el 70 %».

Enfermería y Farmacia, más que un plan B

La décima nota de Enfermería de Santiago es 12,528. Esto quiere decir que esta persona y las otras nueve que encabezan el listado podrían haber entrado en Medicina (este año ha cerrado por debajo de 12,5). Lo mismo ocurre con Farmacia, cuyo décimo inscrito tiene incluso más nota, un 12,630; esto le permitiría entrar en Medicina en Santiago.

Pero no todo el mundo se lo plantea de la misma manera. La decana de Farmacia, María Isabel Sández, es un ejemplo de esto: «En mi familia no había farmacéuticos. Mi padre y mi abuelo eran médicos y yo estudié en una época en que se podía elegir. Pero la medicina es algo muy vocacional y a mí me gustaba la farmacia. Si tuviese que elegir otra vez, no lo dudaría».

No hay paro

Entre los farmacéuticos «no hay paro», porque suponen unos estudios muy versátiles y la facultad de Santiago tiene un gran prestigio a nivel nacional: «De las 50 primeras notas del FIR [MIR de farmacia] de nuestra facultad salieron 12», comenta orgullosa Sández. Además de trabajar en el hospital o en una botica, hay una salida hacia la investigación (básica o en laboratorios) y hasta en atención primaria. Pocos alumnos hacen un máster, ya que la carrera es de cinco años y los que investigan saltan directamente al doctorado.