Piden la inaplicación del convenio, que afecta a 900 trabajadores en Galicia
27 dic 2018 . Actualizado a las 14:05 h.Cuando en el año 2014 se puso en marcha el actual concurso para el transporte sanitario urgente, algunas pequeñas empresas gallegas de ambulancias hicieron la advertencia de que las condiciones económicas a la baja les impedían participar y, además, iba a ser difícil para las ganadoras mantener el servicio. Menos de dos años después de la adjudicación, el tiempo les ha dado la razón. La patronal, a través de la Federación Gallega de Empresarios de Ambulancias, ha solicitado la inaplicación del convenio colectivo porque no tiene capacidad económica para mantenerlo.
La federación encargó varios estudios que concluyen que con el precio fijado por cada ambulancia adscrita al 061 se abonan unos 240.000 euros. Y aplicando el convenio en vigor en Galicia, solo teniendo en cuenta el coste salarial, el precio medio de cada vehículo es de 280.000 euros. Una diferencia a la que hay que añadir gastos puntuales como la compra de vehículos, seguros o carburantes. Estos problemas de viabilidad económica en las empresas de la federación, muchas familiares, «hacen imposible mantener durante más tiempo esta situación», señalan.
Y ahora ¿qué?
La patronal ya ha hablado con la Administración y ha solicitado la inaplicación del convenio, es decir, que no se mantengan las condiciones laborales actuales de los trabajadores, unos 900 en 18 empresas. Pero quien tiene que decidir si realmente hay motivos que justifiquen esta inaplicación no es la Xunta, el 061 en este caso, sino la Comisión Consultiva Nacional de Convenios Colectivos. En caso de aprobarse, se volvería a las condiciones anteriores, y serían los trabajadores los que podrían tomar medidas, ya que empeoraría su situación. Si no se aprueba esta inaplicación, cada empresa valorará qué medida adoptar si no puede costear el servicio, entre ellas el cierre.
La Fundación Pública 061 está en medio de este conflicto, que afecta a su transporte sanitario urgente, unas once ambulancias medicalizadas y más de un centenar de asistenciales. Y su papel en este caso es secundario, pero puede actuar. Una alternativa sería elevar el coste del servicio, es decir, pagar más a las empresas, lo que perjudica claramente a las pequeñas firmas que no pudieron optar al concurso por estas condiciones a la baja.
De momento, desde el 061 se mantienen al margen, y defienden el proceso llevado a cabo para adjudicar las ambulancias: «Hay que destacar que el procedimiento para la contratación de la red de transporte sanitario urgente se realizó siguiendo escrupulosamente la legislación vigente, y más en concreto la ley de contratos del sector público», explican desde esta fundación.
121 millones hasta el 2019
El concurso no estuvo exento de polémica por estas críticas de las pequeñas empresas, y finalmente se resolvió a finales del 2015. La inversión total supera los 121 millones de euros y Ambuibérica, una empresa de ámbito estatal, es la que consiguió un mayor número de lotes. Muchas entidades se presentaron en UTE para poder competir en este concurso, porque se hicieron paquetes grandes, dividiendo en catorce áreas la comunidad gallega. Pero menos de dos años después, el servicio está en riesgo al asegurar las empresas que, al aplicar el convenio laboral vigente, «el actual presupuesto no permite ni siquiera cubrir el coste laboral».
Más de cien vehículos y 18 empresas distintas
El transporte sanitario urgente incluye en Galicia más de 120 ambulancias, la mayoría asistenciales y en torno a una docena medicalizadas. Salió a concurso en el 2014 por más de 121 millones de euros hasta el año 2019. Aunque algunas concursaron en UTE para poder optar a los lotes, en total este servicio engloba a 18 empresas que dan trabajo a novecientos empleados.