Los médicos no podrán negarse a que se publique lo que reciben de farmacéuticas

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Kristopher Grunert | efe

La Agencia de Protección de Datos considera que no es preciso su consentimiento

07 ene 2018 . Actualizado a las 09:09 h.

En el año 2016, las compañías farmacéuticas publicaron por primera vez lo que denominan transferencias de valor. Es decir, los recursos que invierten en los profesionales y las organizaciones sanitarias para que realicen proyectos de I+D y para que acudan a reuniones y congresos científicos. Se trata de la única forma que tienen los médicos y otros trabajadores de la salud de formarse, reciclarse y conocer nuevos fármacos y tecnologías, pero la relación entre los laboratorios y los facultativos siempre ha estado bajo la lupa, de ahí esta iniciativa de Farmaindustria para dar transparencia a todo el proceso de colaboración.

En los dos primeros informes, los que se publicaron en los años 2016 y 2017, los datos se dieron a conocer de forma agregada, y solo individualizada, con el nombre del médico, si este daba su consentimiento. Pero esto se ha acabado. Las compañías farmacéuticas adheridas al código de buenas prácticas han pedido un dictamen a la Agencia Española de Protección de Datos para saber si pueden publicar esta información sin recabar el consentimiento de los interesados. Y la entidad dice que sí, ya que hay un interés legítimo. Eso sí, recoge el dictamen que una vez dados a conocer en las webs de los laboratorios estos datos individualizados, «deben adoptarse las medidas que eviten ulteriores tratamientos». Por ejemplo, apunta el informe que no se pueden indexar a través de motores de búsqueda o cruzarse con las informaciones de otras webs.

De lo que se trata es de que haya transparencia en las colaboraciones de farmacéuticas y médicos, recogiendo de forma individual la aportación -en cuotas de inscripción, desplazamiento y alojamiento para asistir a congresos-, pero que no se puedan hacer, por ejemplo, ránkings de los fondos de unos y otros.

112 millones en España

En el 2016, la industria asentada en España aportó unos 194 millones de euros en contratos para proyectos de I+D, 112 en ayudas a profesionales para acudir a congresos y reuniones, 81 millones para las organizaciones que realizan estos eventos, 79 millones para la prestación de servicios profesionales y otros 35,5 millones para donaciones a organizaciones sanitarias.

Desde 15 euros por manutención a más de 8.000 de un laboratorio

El primer año solo se publicaron de forma individualizada en España el 20 % de las aportaciones de las farmacéuticas, porque los facultativos no dieron el consentimiento en el resto de los casos, pero en el 2017 ya fueron el 35 %, lo que supone un avance considerable en transparencia. Y en el 2018 los médicos no podrán negarse, así que se publicarán todas. No obstante, el listado no escatima en detalles. Centrándose solo en un laboratorio, Novartis España, hay casi dos centenares de colaboraciones con médicos gallegos, con aportaciones tan diversas que van desde los 15 euros por la manutención en una jornada a los más 8.000 a un facultativo, en este caso por cuotas de congresos, alojamiento y manutención, y también por prestación de servicios.

Entre este abanico hay múltiples cantidades de menos de cien euros, de varios cientos o de miles. Sandoz, por ejemplo, solo recoge en el 2016 tres colaboraciones con profesionales gallegos, que van de 339 hasta 2.038 euros.

Un decreto dejará claro que las ayudas para formación no tributan

En mayo del 2017, el ministro de Hacienda puso en alerta a toda la profesión médica y a las farmacéuticas: los facultativos tendrían que tributar por las ayudas para asistir a estos congresos y reuniones científicas. El anuncio provocó indignación porque la formación de los médicos es prácticamente obligatoria y en estos momentos no hay otra forma de reciclarse. De hecho, los colectivos sanitarios demandaron que, de mantener este criterio, debía ser la Administración la que se encargase de la actualización. Pero la sangre no llegó al río y Hacienda prepara ya un real decreto para modificar el reglamento del IRPF y dejar así claro que las transferencias de valor de la industria farmacéutica a profesionales sanitarios para su formación están exentas de tributación.