Mari Carmen Barbosa, en Vigo, acudió al Registro Civil para tramitar la resolución de una herencia
09 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Mari Carmen Barbosa Rodríguez acudió ayer al Registro Civil de Vigo y se fue con las manos vacías. Quería solicitar un certificado de defunción para preparar la documentación necesaria para recibir una herencia. Pero la respuesta de los funcionarios fue negativa. Solo 7 de los 17 miembros de la plantilla cubren los servicios mínimos, que se limitan a permisos de enterramiento y otras cuestiones urgentes en las que los solicitantes puedan acreditar que tienen un plazo para realizar las tramitaciones. «Me dijeron que, si es urgente, que vaya a un notario y me haga un papel conforme lo es», afirmaba ayer sin ocultar su cara de decepción. Necesita arreglar en breve todos los papeles relacionados con la herencia. «Cuanto antes se presenten, antes se arreglan las cosas, porque si no después tenemos que pagar una multa». Cientos de personas se vieron afectadas, como ella, en los juzgados de Vigo, donde se suspendieron alrededor de un centenar de juicios. En el uno de lo penal, por ejemplo, había uno con numerosos testigos que tuvieron que marcharse. «Que se sienten a negociar y no se levanten hasta que hayan llegado a un acuerdo», decía el abogado José Manuel Nieto.